«Mi vida es mi familia y el Real Zaragoza», así comenzaba Alberto Zapater la rueda de prensa de despedida antes de disputar el que será el último encuentro con la camiseta del Real Zaragoza este viernes, a partir de las 21:00 horas, frente al CD Tenerife en La Romareda. Un encuentro en el que se ha preparado un homenaje para el gran capitán, que se despedirá del club después de 421 partidos (serán 422 si juega este viernes), 12 temporadas en dos etapas distintas en el Real Zaragoza y un gran número de momentos que permanecerán por siempre en la memoria de los zaragocistas.
Un Alberto Zapater que quería dar las gracias a todos aquellos que le han acompañado en su trayectoria deportiva desde sus inicios hasta el final: «El viernes es mi último día con la camiseta del Real Zaragoza. Me enseñaron a decir por favor, perdón y gracias: perdón a los que crean que no he estado a la altura, a la afición, y quiero dar gracias a todos los que forman parte de este sueño, de un chico de Ejea, a todos mis amigos de Ejea, de Zaragoza, a los colegios que me formaron junto al Zaragoza como persona, y a todos los que han compartido conmigo algún momento, formáis parte de mi. Pero sobre todo a mi familia, nos preparan para muchas cosas, pero ellos son los que sufren, a mi hermano que se que me quiere como a nada, a mis tíos que me acogieron en Zaragoza y puedo considerarlos como mis padres, a mi madre que nos cuidó y sufrió el no tener a su hijo. A mi mujer, ella sabe lo que es aguantar a Zapater todos los días, gracias por permitirme seguir anteponiendo el Zaragoza a vosotros«.
El capitán no confirmaba en rueda de prensa si se trata de una retirada o simplemente un punto y seguido en su carrera, pensando únicamente en terminar de la mejor forma posible con el Real Zaragoza. Eso sí, trasladaba que no se ve jugando en otro equipo de España que no sea el Real Zaragoza, por tanto, de haber un destino para Zapater, será lejos de nuestro país.
Alberto Zapater ha transmitido el querer ser recordado como un jugador que se lo dejó todo sobre el terreno de juego, que siempre jugó con pasión, y que superó todos los obstáculos habidos y por haber con un único objetivo: jugar en el Real Zaragoza el mayor tiempo posible.
De esta forma, el centrocampista pondrá fin a su etapa como futbolista de la entidad blanquilla este viernes ante el CD Tenerife donde se espera una gran entrada y, sobre todo, más momentos emotivos como el que se vivió este miércoles en la sala de prensa del Estadio Municipal de La Romareda. Su casa, la de todo el zaragocismo, despedirá a una leyenda del club que formará siempre parte de la historia del Real Zaragoza, con un legado difícil de igualar, y una forma de defender al club única.
