El entrenador de Casademont Zaragoza analiza lo que ha dado de sí el encuentro de cuartos de final de Copa frente a Unicaja, con un dominio en el rebote por el bando local que ha sido determinante. Pese a ello, el cuadro aragonés ha peleado de tú a tú a los anfitriones, ganando tres de los cuatro cuartos, y manteniendo sus opciones hasta el final. Una gran imagen que, sin embargo, no es consuelo para el técnico segoviano.
ASÍ LO VIO PORFIRIO FISAC
“Lo primero es felicitar a Unicaja por el pase a semifinales, ya que ha peleado muy bien el partido y se lo han merecido. En cuanto al choque, en la primera parte hemos sabido controlar muy bien el ritmo, jugando con alegría y frescura; pero en la segunda ellos han sabido colapsarnos mejor y cortar nuestra iniciativa de juego. Ellos tienen un punto físico más en su rotación y eso lo hemos notado en el tercer cuarto. No sé si ha sido desfallecimiento nuestro o empuje y acierto de ellos, pero somos muy sólidos y no nos hemo ido del partido. Sin embargo, la mayor diferencia es el número de tiros y el de rebotes entre un equipo y otro. Pienso que eso ha sido la clave y lo que ha decantado el encuentro”.
Gran competitividad, poco consuelo
“Son momentos y situaciones. Yo hablo de sentimientos en el momento en el que me encuentro y la realidad es que ahora mismo me encuentro fastidiado por no pasar, ya que creo que tengo un grupo de jugadores que se merecía clasificarse, aunque esto no significa que no se lo merezca Unicaja. Consuelos pocos cuando uno pierde en una circunstancia así. Los jugadores han salido a ganar y con toda la ambición, pero te encuentras con un equipo que sale igual y que nos ha dominado el rebote, que ha sido determinante”.