Más de una decena de infraestructuras de comunicación terrestre, fundamentalmente autovías y ferrocarril, se encuentran en Aragón pendientes de ser ejecutadas por la Administración General del Estado pese al consenso existente sobre su valor estratégico para mejorar el desarrollo social y la competitividad en la Comunidad Autónoma.
Esta mañana el portavoz de Vertebración del Territorio del Partido Popular en las Cortes de Aragón, Joaquín Juste, ha llamado a los partidos con representación en el Parlamento regional a aunar voluntades para reclamar al Gobierno de España una implicación inversora significativa en el proyecto presupuestario para 2020 que prepara Pedro Sánchez. Se trata de una iniciativa parlamentaria porque, como dijo, “llevamos tiempo ofreciendo un pacto a todo el mundo para que se sume, un Pacto por las Infraestructuras de Aragón, por las de ámbito autonómico pero también por las de ámbito nacional y es lo que pedimos al resto de partidos, sumarnos todos para conseguir de una vez por todas finalizar estas infraestructuras tan importantes y tan decisivas para el desarrollo de la Comunidad Autónoma”.
La propuesta legislativa del diputado popular que será debatida en la sesión plenaria que las Cortes de Aragón celebran la próxima semana, recoge catorce obras públicas cuya ejecución corresponde al ámbito competencial del Ministerio de Fomento y que desde hace años se encuentran o paralizadas o con retrasos exagerados en los trámites administrativos. “Tanto el Gobierno como todos los partidos, en estos momentos nos tenemos que unir para que esos presupuestos generales del Estado de 2020, después de dos años prácticamente sin inversión, llegue esa inversión a Aragón y se pueda llevar a cabo estas infraestructuras vitales y fundamentales para nuestra tierra”, explicó el portavoz del Partido Popular.
Los proyectos citados por Juste en su iniciativa parlamentaria son el Corredor Cantábrico-Mediterráneo en el tramo Zaragoza-Teruel-Sagunto, la recuperación de los tramos ferroviarios de la línea internacional Canfranc-Pau, la recuperación del eje Sines-Algeciras-Madrid-Paris a través de la Travesía Central de los Pirineos, la autovía A-40 Teruel-Cuenca, la autovía A-68 en entre las localidades de El Burgo de Ebro y Fuentes de Ebro-Ventas de Valdealgorfa, la N-330 entre Teruel y Ademuz, el desdoblamiento de la N-2 entre Alfajarín y Fraga, la autovía A-22 entre Huesca y Siétamo, la autovía A-23 entre Huesca y Somport, la puesta en servicio del túnel de la A-68 de salida de Zaragoza, la transformación en autovía de las carreteras que enlazan Aragón con Navarra por la provincia de Zaragoza (A-68) en el tramo Figueruelas-Mallén y la de Huesca (A-21), la autovía Daroca-Calatayud (A-24), la autovía Monreal del Campo-Alcolea del Pinar (A-25) y la construcción de la autovía A-14.
El sustento argumental de la propuesta de Joaquín Juste tiene su origen en la dependencia que sufre Aragón, debido a su extensión y orografía, de contar con vías de comunicación que faciliten las conexiones intraterritorial e interterritorial tanto para avanzar en el asentamiento de la población en los pequeños y medianos municipios como, desde el ámbito económico para favorecer la competitividad de las empresas aragonesas, y como señaló “desde el Partido Popular consideramos que Aragón tiene una situación estratégica envidiable, que en Aragón llevamos muchos años ya trabajando por la logística en esa dirección pero no se puede desarrollar esa actividad económica, esa logística, esas empresas si no tenemos infraestructuras”.