La adopción de estas medidas responde a la evolución epidemiológica de la pandemia de COVID-19 en la comunidad y se sustenta jurídicamente en el Decreto-ley 7/2020, de 19 de octubre, por el que se establece el régimen jurídico de alerta sanitaria para el control de la pandemia COVID-19 en Aragón, aprobado el pasado lunes.
Situación epidemiológica
Así, la situación de Aragón durante las últimas semanas ha experimentado un notable incremento tras un periodo de estabilidad que abarcó desde finales de agosto a principios de octubre. En este periodo se ha pasado de 166 casos por 100.000 habitantes en la semana 40 a 219 en la semana 41 y 260 en la semana 42, la última. En los últimos 14 días la incidencia es de 586 por 100.000 habitantes. Asimismo, también ha aumentado el porcentaje de pruebas positivas sobre el total realizadas, con cifras que oscilan entre el 17 y el 20% de positividad en pruebas PCR. En cuanto a los indicadores de hospitalización, más del 40% de las camas de UCI están ocupadas por enfermos de COVID-19.
Si bien esta es la situación general de la comunidad, las tres capitales de provincia presentan además algunas particularidades que hacen necesario decretar su confinamiento perimetral. En el caso de Zaragoza, la incidencia es de 543 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, con una fuerte relación de transmisión en el entorno familiar y social vinculado a relaciones, ocio y a los recientes días festivos.
En el caso de Huesca y Teruel, por ser ciudades de menos de 100.000 habitantes, se han valorado también criterios cuantitativos además de cualitativos. Huesca tiene una incidencia acumulada en los últimos 14 días de 1.003 casos por 100.000 habitantes y Teruel, de 1.418 casos en el mismo periodo. Además, ambos núcleos de población son ejes de movilidad respecto a su entorno próximo.
El confinamiento perimetral de las tres capitales de provincia, que ya ha entrado en vigor , supone la restricción de la libre entrada y salida de personas residentes, salvo las siguientes excepciones: asistencia a centros sanitarios, obligaciones laborales, retorno al lugar de residencia, cuidado de dependientes, asistencia a centros escolares o causas de fuerza mayor.
Se permite la circulación dentro del municipio afectado, si bien se recomienda evitar los desplazamientos ya actividades no imprescindibles.
Asimismo, el decreto-ley establece la entrada de toda la comunidad aragonesa en nivel 3 a partir del próximo lunes, lo que conlleva, entre otras, las siguientes normas específicas:
- Cierre de la hostelería a las 22.00 horas, con prohibición de consumo en el interior del local y un aforo máximo en las terrazas del 50%.
- Reuniones sociales de un máximo de 6 personas.
- Entierros y velatorios: 15 personas en espacios abiertos y 10 en espacios cerrados.
- Celebraciones: 10 personas en el interior y 15 en el exterior.
- Lugares de culto: 25% del aforo permitido.
- Hipermercados, medias y grandes superficies y parques comerciales: aforo máximo del 25%.
- Establecimientos de venta de alimentación: 50% de aforo.
- Mercados al aire libre: 25% de los puestos habituales.
- Gimnasios, piscinas: 25%.
- Museos y salas de exposiciones: 25%.
- Cines, teatros, auditorios, con butacas preasignadas: 25%. Al aire libre: 25% del aforo, con un máximo de 150 personas.
Ante estas nuevas normas, el presidente aragonés ha hecho una mención especial al sector que se ha visto particularmente afectado, el de la hostelería y el ocio, que a su juicio necesita gestos del Gobierno de Aragón “de aliento y de compromiso económico” y ya ha avanzado que “no faltará apoyo institucional ni económico”.
«Para combatir la pandemia no vamos a escatimar recursos materiales con PCRs, rastreadores, habilitando hospitales de campaña y además siempre dijimos que no nos temblaría la mano para tomar las decisiones pertinentes», ha indicado el responsable del Ejecutivo aragonés.