Los trabajos para intervenir en los revocos del claustro de la Colegiata de Santa María ya se han iniciado. Esta intervención, a la que se destinan unos 40.000 euros, está dirigida a paliar los daños que ha provocado la humedad en el edificio.
El proyecto presentado por el Ayuntamiento de Calatayud fue una de las iniciativas seleccionadas por el Ministerio de Cultura, dentro de su programa de intervenciones en el patrimonio UNESCO, dirigidas a la conservación, la protección y la difusión de bienes declarados patrimonio mundial. Esta ayuda se sitúa en 18.000 euros, que el Ayuntamiento completa con fondos propios.
El concejal de Urbanismo y Patrimonio, José Manuel Gimeno, valora estas obras como «muy necesarias para dar una solución a los problemas que la humedad genera en este monumento, que está catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO».
La obra que ya ha comenzado es la primera de tres intervenciones que el Consistorio plantea en el claustro, para realizar una rehabilitación integral, para las que espera contar con fondos procedentes de Diputación Provincial de Zaragoza y nuevas convocatorias del Ministerio de Cultura. Estos trabajos se centran en la zona noroeste del edificio, que se encuentra más afectada por la humedad.
La actuación ha sido adjudicada a la empresa bilbilitana Construcciones Puente Argal. La empresa levantará el pavimento y excavará una zanja de ventilación, labores que contarán con seguimiento arqueológico y se realizará con medios manuales. También se picarán los revestimientos de los muros interiores del claustro, se repararán grietas, pavimentos interiores y se aislará adecuadamente para garantizar la ventilación.
Durante el desarrollo de las obras quedan suspendidas las visitas al museo de arte sacro que alberga este claustro y las visitas guiadas a la torre de Santa María.