El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha inaugurado esta mañana las primeras obras de rehabilitación del Plan Extraordinario de Carreteras (PEC). Este plan abarca 1.700 kilómetros de vías, una mejora largamente esperada por los aragoneses. Azcón ha elogiado al departamento de Fomento, Vivienda, Logística y Cohesión Territorial, dirigido por Octavio López, y ha subrayado que las carreteras aragonesas dejarán de ser las peores de España.
Desde la carretera autonómica A-122, cerca de la glorieta que conecta con la A-121 en La Almunia de Doña Godina (Zaragoza), Azcón explicó que el PEC prevé renovar 1.767,23 kilómetros de la red de carreteras de Aragón para 2027. Este plan implica una inversión de 630 millones de euros y será ejecutado por la UTE concesionaria AIGI Ibérica de Gestión de Infraestructuras, S.A., formada por Ascendi, COPHA (Grupo Mariano López Navarro) y Sumelzo.
El presidente y el consejero presenciaron los primeros trabajos de fresado y asfaltado de un tramo que conecta La Almunia de Doña Godina con Figueruelas, pasando por Ricla, Fuendejalón y Alberite de San Juan. Esta vía, de 41 kilómetros y 275 metros, incluye la renovación del firme, señalización y barreras de seguridad.
La obra en la A-122 forma parte del Itinerario 2 de los 11 que conforman el PEC. Este itinerario también incluye la renovación de la A-121 (Magallón-La Almunia de Doña Godina), la A-202 (Calatayud-límite con Guadalajara) y la A-220 (La Almunia de Doña Godina-intersección con la A-1101 en Villanueva de Huerva). Según los contratos firmados el 12 de junio, cada itinerario deberá completarse en 30 meses, por lo que estas carreteras estarán renovadas a más tardar el 26 de enero de 2027.
Las obras de los otros itinerarios comenzarán conforme se aprueben los proyectos constructivos, previstos para agosto. En total, se renovarán 51 carreteras de la red básica autonómica, que soporta aproximadamente el 60% del tráfico. El PEC también incluye la construcción de seis variantes en Valderrobres, Binéfar, Sástago, Monzón, Sariñena y Mora de Rubielos, mejorando la seguridad y reduciendo el ruido y la contaminación en estas localidades.
El PEC adopta un modelo concesional, donde las empresas concesionarias serán responsables del mantenimiento, basado en criterios de calidad. El presupuesto total asignado, durante los próximos 25 años, superará los 2.600 millones de euros.