EIBAR – El Real Zaragoza resistió más de una hora con un jugador menos en Ipurúa y acabó llevándose su segunda victoria consecutiva (1-2) en un partido repleto de emociones y claves tácticas. Tras el choque, el técnico Rubén Sellés analizó en rueda de prensa las claves del triunfo, destacando la competitividad y el compromiso del grupo.
El entrenador zaragocista abrió su comparecencia con una valoración general del encuentro: “Un partido en el que ha habido muchísimas situaciones y del que podríamos estar tres horas hablando acerca de cada una de ellas. Nosotros queríamos venir a jugar, a tener el balón, a ser competitivos. Creo que nos ha faltado un poco de agresividad en el último tercio en esa primera fase del juego… y luego ha pasado todo el caos con la expulsión, el penalti, la parada, el gol”.
Sellés se mostró satisfecho por la actitud y la fortaleza defensiva del equipo: “El equipo ha demostrado que quiere hacerlo, que tiene carácter, que tiene solidaridad y competitividad. Hemos mostrado capacidad de supervivencia, carácter, y estoy muy contento por ellos”.
“El partido ha exigido el máximo de todos”
El técnico reconoció la dificultad del contexto y valoró el mérito del equipo tras la expulsión de Yussif Saidu en el minuto 25: “El partido ha exigido el máximo de cada uno, incluido el máximo del entrenador. Ahora mismo esos seis puntos nos reafirman en que somos un equipo tan competitivo como cualquiera en la categoría”.
No obstante, quiso frenar cualquier euforia: “Lo que no tenemos que hacer es creer que el trabajo ya está hecho. Todavía estamos en una posición muy complicada, tenemos mucho por hacer. Mañana prontito, otra vez a trabajar”.
Clave táctica: defensa en bloque bajo y ajustes
Sellés explicó su decisión de reforzar la defensa con cinco hombres tras la expulsión: “Era importante cerrar esos pasillos, acumular gente a nivel defensivo y luego, con los tres centrocampistas, forzar a un lado. Lo más importante era no defender área propia desde el inicio”.
A pesar del dominio de Eibar con uno más, el Zaragoza mantuvo su bloque compacto y evitó caer en el desorden. “No era fácil esa segunda parte con menos de un 20% de posesión, pero el equipo con una defensa muy joven ha interpretado perfectamente todas las situaciones”, elogió Sellés.
Crítica al exceso de tarjetas
Respecto al arbitraje, Sellés no quiso entrar en polémicas, pero fue autocrítico con la acumulación de sanciones: “Llevamos dos partidos con dos segundas amarillas y dos tarjetas rojas. No es admisible en un equipo profesional. Es una cosa que como equipo tenemos que solucionar. Necesitamos cortar ya eso porque hemos demostrado que somos muy competitivos con 11, pero no todos los días vamos a poder resistir con 10”.
Supervivencia y gol de Toni Moya
Sellés reveló que el equipo estaba preparado para este tipo de escenarios: “La semana pasada entrenamos 62 minutos defendiendo con línea de cinco. Sabíamos que nuestra salvación pasa por ser sólidos a nivel defensivo”.
Sobre cómo vivió el gol del triunfo, fue claro: “Casi no te da tiempo. He ido, le he dicho al equipo que había que seguir así. Si acumulaban uno más por fuera, teníamos que ir a una línea de seis y aguantar como sea. Creo que lo disfrutaré ahora, cuando acabe todas mis labores”.






