El Consejo Económico y Social de Aragón (CESA) ha celebrado este martes una jornada bajo el título “Situación socioeconómica de Aragón” en la Sala de la Corona del Pignatelli. Durante el evento, con la participación de representantes del tejido económico y social de la región, se ha analizado el panorama actual de la comunidad.
La vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, clausuró la jornada subrayando el objetivo del Ejecutivo de seguir mejorando las cifras económicas. Vaquero señaló que «detrás de cada estadística hay personas que esperan una mejora en su calidad de vida». También mencionó que el número de parados ha disminuido un 2,42% en el último año, con 1.400 mujeres desempleadas menos y más de 615.000 afiliados a la Seguridad Social.
Además, Vaquero destacó las previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), que se espera aumente entre un 2,5% y un 2,8% en 2024, con una variación interanual del 3,4% en el segundo trimestre.
El presidente del CESA, Juan García Blasco, expresó su optimismo sobre la evolución económica de la comunidad, resaltando que Aragón tiene una de las tasas de paro más bajas del país. Sin embargo, reconoció que «aún queda mucho por hacer». García Blasco presentó las reflexiones y propuestas incluidas en el informe 2023, con más de 50 iniciativas en tres áreas: economía, trabajo y empleo, y condiciones de vida.
En su informe anual, el CESA señaló que en 2023 la economía de Aragón creció un 2,7%, con mejoras en el empleo, exportaciones y reducción de la inflación. Sin embargo, el aumento de precios afectó negativamente a los hogares. A pesar de esto, la calidad de vida en Aragón sigue siendo superior a la media nacional, destacando en ámbitos como la educación y el bienestar social.
El informe también incluye propuestas para mejorar las infraestructuras, atraer y retener talento, y aumentar la inversión en I+D+i.