El encarecimiento constante de los carburantes y la electricidad coloca la inflación en el 9,3% en Aragón si comparamos el dato con mayo del año pasado y un 0,6% de variación mensual. Los alimentos y bebidas no alcohólicas siguen subiendo mes a mes y se sitúan en una variación del 7,5% en lo que va de año y un 11,6% interanual. El grupo de la Vivienda da una pequeña tregua en su comparativa mensual (1,1%) pero aún así se mantiene en un 20,3% de variación interanual debido al precio de la electricidad.
El desproporcionado aumento del gasóleo y la gasolina (hay que recordar que el litro ha superado los 2 euros) deja la variación interanual del grupo del Transporte en el 14,7%. En los últimos 10 años, el precio de la gasolina en España ha crecido un 34,1%, y el del diésel se ha encarecido en un 39,8%. La elevada inflación en estos dos grupos ha condicionado al resto de grupos como el de Menaje (6,5% interanual), Hoteles, cafés y restaurantes (5,2%), Otros bienes y servicios (3,8%), Bebidas alcohólicas y tabaco (3,6%) y Vestido y calzado (3,0%).
Pablo Castillo, secretario de acción sindical de CCOO Aragón, asegura que es “necesario un pacto de rentas que reparta los costes de la inflación entre todas las rentas, no solo las del trabajo, sino también entre los beneficios empresariales, rentas del alquiler y contribuyentes, además de acabar con el ineficaz funcionamiento en la fijación del precio mayorista de la electricidad”.