Apoyar las energías renovables y su desarrollo es clave para el crecimiento económico y la vertebración territorial de la Comunidad Autónoma. Así lo considera CEOE Aragón, que ve una oportunidad única que hay que aprovechar en el hecho de que Aragón sea, por condiciones geográficas y climáticas, y por la apuesta inversora de diversos grupos empresariales, una región líder en este sector.
Las energías renovables constituyen una de las líneas estratégicas de la economía europea para los próximos años y parte fundamental en el compromiso con el avance de la economía verde dentro del Plan Europeo para la Recuperación y los fondos Next Generation, cuya tramitación se empieza ahora a despejar. Son, además, un sector maduro tecnológica y empresarialmente, y con gran potencial de crecimiento y competitividad a nivel mundial.
Por todo ello, la posición de Aragón en el sector y la generación de proyectos con fuerte inversión desde la propia Comunidad Autónoma son valores sólidos de crecimiento que deben potenciarse.
Aragón es actualmente la segunda Comunidad en potencia eólica instalada, con 4.138 megavatios, solo por detrás de Castilla y León. También es líder en energía fotovoltaica, tecnología en la que pugna por consolidarse como la cuarta región productora, junto con Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Extremadura, tras haber multiplicado por más de cinco su potencia instalada durante 2020.
En ambos subsectores pueden registrarse avances significativos en próximas fechas gracias a todos los desarrollos previstos, que permitirán duplicar la potencia instalada de Aragón en el corto plazo y pueden llevarla a encabezar el sector en 2030.
CEOE Aragón quiere destacar el efecto tractor de las energías renovables en el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), así como su efecto complementario en las rentas de agricultores y propietarios de parcelas en el medio rural, en la generación
de puestos de trabajo directos e indirectos, y en la generación de ingresos para los ayuntamientos, que deben permitir dotar servicios y empleos municipales.
Se estima que en la fase de construcción de un parque eólico se generan en torno a cinco puestos de trabajo, entre directos e indirectos, por cada megavatio instalado. A ellos hay que sumar los generados por el mantenimiento de las instalaciones durante toda su vida útil.
En algunas zonas, estos proyectos permiten poner en valor terrenos improductivos o sin una adecuada explotación. Favorecen, además, oportunidades de crecimiento de otros sectores en el medio rural, siendo factor de atracción para la industria descarbonizada del siglo XXI.
A los parques de energías renovables que se instalen en los próximos años se añadirán, además, sistemas de almacenamiento como los bombeos hidroeléctricos o el hidrogeno, que permitirán aumentar la generación de empleo, actividad económica e innovación en los territorios donde se implementen, siendo un arma contra la despoblación. En concreto, pueden aportar grandes beneficios en las zonas de transición justa.
Por otro lado, el avance en sus tecnologías y desarrollos debe contribuir a minorar los costes energéticos tanto para empresas como para el conjunto de los ciudadanos.
CEOE Aragón resalta que, por tanto, este sector permite aprovechar recursos endógenos de la Comunidad Autónoma en beneficio de sus habitantes y su economía. En consecuencia, entiende que debe favorecerse su desarrollo en el conjunto de Aragón y especialmente en comarcas con baja población que encuentran en las renovables una oportunidad de crecimiento sostenible.
DATOS DEL SECTOR Y SUS PROYECTOS
Según el último Informe del Sistema Eléctrico Español, en términos de cobertura de la demanda autonómica con energías renovables, hay ya 5 autonomías que generan más del 100% de su demanda con recursos renovables autóctonos. Aragón ocupa el segundo puesto con una producción de 7.307.176 MWh de generación eólica en 2020 por debajo de Castilla y León.
Según datos actualizados a 31 de Marzo de 2021, en la comunidad autónoma de Aragón se encuentran puestos en servicio 4.138 Mw eólicos y 1.199 Mw fotovoltaicos.
Los proyectos que en la Comunidad Autónoma tienen conexión autorizada y están pendientes de su ejecución para la puesta en marcha suman 3.412 Mw de energía eólica y 7.130 Mw fotovoltaicos. Su ejecución supone una inversión aproximada conjunta de 7.200 millones de euros y la creación de más de 7.000 puestos de trabajo de mantenimiento durante los 30 años estimados de vida útil de los parques.