Dinamita para el ataque arlequinado: el delantero Dani Salas se une al CD Ebro y será un quebradero de cabeza para las defensas rivales la próxima temporada. El jugador, de 23 años, cuenta con un gran historial goleador a sus espaldas; en el último mercado invernal firmó por el Tropezón, del grupo II de 2ª RFEF, donde en apenas 18 partidos anotó 6 goles. Anteriormente jugó en el Rayo Cantabria (filial del Racing de Santander) y en la Gimnástica de Torrelavega de 3ª RFEF, donde consiguió 17 dianas en solo 24 partidos.
Salas, que también militó en el Getafe B cuando el club madrileño competía en 2ªB, se caracteriza por su velocidad y verticalidad, además de por saber perfilarse muy bien en los espacios y por correr con agilidad a la espalda de la defensa. «Sé atacar muy bien los espacios y soy un jugador que con confianza puede aportar muchos goles al equipo», ha dicho el futbolista sobre sí mismo en sus primeras declaraciones como arlequinado.
El delantero, que contaba con varias ofertas dado su olfato goleador, ha acabado decantándose por el Ebro para llevar al equipo lo más lejos posible. «Me han hablado muy bien del club y los objetivos que me han propuesto son ambiciosos; además, creo que el sistema de juego es acorde a mis características y me va a beneficiar tanto a mí como al equipo», ha subrayado Dani Salas, que confía en ayudar al club «con goles y asistencias».
Precisamente las metas planteadas por el club han sido uno de los puntos diferenciales para que el futbolista acabe recalando en La Almozara. «Lo que más me ha motivado es que, a pesar del grupo tan difícil que nos ha tocado, se han propuesto unos objetivos altos y con la aportación de cada jugador vamos a intentar cumplir las expectativas tan altas que se han puesto en nosotros», ha concluido el delantero.