Día internacional de las Niñas y las TIC -Jueves 22 de abril.

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¿Las niñas son peores en Matemáticas y mejores en la
asignatura de Lengua? En pleno siglo XXI todavía existe una brecha de género en torno a los estudios de matemáticas e ingeniería. Empieza a observarse desde los primeros años de
colegio, en la Educación Primaria, y aumenta a medida que van creciendo. A ello se suma que el profesorado no percibe que sus alumnas se consideren peores en Matemáticas que sus alumnos.
Diez profesoras de la Universidad de Zaragoza e investigadoras del I3A (Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón) han elaborado un estudio que muestra que las niñas se consideran peores en Matemáticas que los niños y tienen mayor ansiedad a la hora de enfrentarse a un examen de esta asignatura.


Existe una relación sobre la preferencia entre Matemáticas y Lengua, eficacia autopercibida y preocupación :Tanto ellos como ellas se consideran mejores en la asignatura que prefieren, y se preocupan más por la otra: para las chicas gira en torno a Lengua, para los chicos en torno a Matemáticas.

De las chicas, un 23.8% prefieren Matemáticas y un 37.2% Lengua; 22.8% se ve mejor en Matemáticas y 58.6% mejor en Lengua y el 18.5% se preocupa más por los exámenes de
Matemáticas, con 14.2% preocupándose más por Lengua.

En los chicos, sucede, al contrario: 40.3% prefieren Matemáticas y 30.3% Lengua, 45.0% se ven mejor en Matemáticas y 22.6% en Lengua y 16.1% se preocupan más por Matemáticas, con
26.3% de chicos preocupándose más por Lengua. Se realizó el análisis entre ciencias Naturales y Ciencias Sociales y no se observan diferencias. La preferencia por las Matemáticas en los niños de Primaria en Aragón es 16 puntos porcentuales superior a las de las niñas. Hay una diferencia de género del 16.6% que se incrementa hasta el 21.3% si sólo consideramos escolares de 8 a 12 años. Solo el 54.9% de las niñas encuestadas señaló ser
buena en Matemáticas mientras ese porcentaje se eleva al 71.5% en el caso de los niños. Con Unidad de Cultura Científica esta percepción de las propias niñas de que las matemáticas no son para ellas casi en la mitad de las encuestadas, podría justificarse que muestren menos interés durante la adolescencia
por las áreas denominadas STEM (siglas en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).


En el trabajo de estas 10 profesoras e investigadoras, publicado en IEEE Transactions on Education, han participado más de 2.000 escolares de entre 6 y 12 años y 200 docentes de
colegios de Aragón, tanto del medio rural (12.6%) como del urbano, incluyendo centros públicos (64.4%) y concertados, en representación de la realidad que hay en Aragón. Un estudio que han realizado a partir de la iniciativa “Una ingeniera en cada cole” que, desde hace cinco años, promueven desde la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT) de Aragón, a la que pertenecen todas ellas. En sus visitas a los colegios, detectaron que la falta de mujeres en estudios de Ingeniería pasaba desapercibida y otros estudios demuestran que, a partir de los 9 años, las niñas manifiestan menos interés por las Matemáticas y la Tecnología que los niños.


¿Cómo cambiar esta situación?

La propuesta de estas 10 investigadoras recoge tres puntos que consideran esenciales para cambiar esta situación. La primera, trabajar en la concienciación del profesorado para acabar con la falta de confianza de las niñas ante las Matemáticas; la segunda, llevar a cabo acciones, sobre todo con las alumnas, para fomentar la actitud positiva hacia esta asignatura y, por último, proponen facilitar mensajes directos sobre el valor de las Matemáticas en el contexto del mundo real.
En la encuesta realizada, al preguntar al alumnado si preferían las Matemáticas o la asignatura de Lengua Española, a partir de los 8 años, los niños respondieron que Matemáticas, mientras
las niñas seleccionaron Lengua. En cambio, esta diferencia de género no se ve en las asignaturas de ciencias naturales y ciencias sociales.


Sobre la utilidad de las Matemáticas, el alumnado entre 6 y 8 años respondía que las consideraba muy útiles, en cambio en el tramo de edad entre 8 y 10 años, el número de niños
que veía esa utilidad aumentaba frente al de las niñas.
El estudio marca una significativa brecha de género cuando se pregunta al alumnado si se consideran mejores en Matemáticas o en Lengua. De las alumnas que no tienen preferencia
entre Matemáticas y Lengua, un 32.3% tienen mayor eficacia autopercibida contra un 20.2 % con mayor eficacia en Matemáticas. En los alumnos, un 17.1 % tienen mayor eficacia en lengua frente a un 37.8 % en Matemáticas. Los estereotipos se mantienen incluso en escolares sin preferencia entre Matemáticas y Lengua. Esta diferencia no se percibe en los resultados académicos del alumnado.
Sobre la ansiedad y preocupación por los exámenes, el género también influye en este caso. Ellas afirman tener ansiedad ante un examen en general y de Matemáticas en particular, sobre
todo, a partir de los 10 años. En el caso de Lengua, solo el 14% de las niñas afirma sentir mayor preocupación por estos exámenes frente a un 26% de los niños.


El estudio de las investigadoras de la Universidad de Zaragoza analiza también la relación entre la percepción del profesorado y lo que creen sus estudiantes. Algo más del 50% del profesorado que ha participado en la encuesta cree que las niñas “nunca” se consideran peores que los niños en Matemáticas. Cuando la realidad es que solo el 54.9% de las niñas dicen que
son buenas en esta asignatura, mientras el porcentaje en los niños se eleva al 71.5%. Este hecho, puede deberse a no encontrar diferencias en los resultados académicos.
Al menos un 50% cree que su alumnado entiende, siempre (9.93%) o casi siempre (41.13%), la utilidad de las Matemáticas. Sin embargo, hay un 56.7% de sus estudiantes que afirman
entender siempre la importancia que tiene esta asignatura.
Ficha de la encuesta: 2.148 cuestionarios entre alumnado de Educación Primaria, entre 6 y 12 años, válidos 2.137 (51.3% alumnos y 48.7% alumnas) y 212 cuestionarios para profesorado, respondieron 156 (75.5% profesoras y un 24.5% profesores). Realizada en 39 centros escolares, 30 en municipios y 9 en colegios rurales agrupados.


Sobre las autoras: Natalia Ayuso. Elena Fillola. Belén Masiá. Ana C. Murillo. Raquel TrilloLado. Sandra Baldassarri. Eva Cerezo. Laura Ruberte. M. Dolores Mariscal. María Villarroya-Gaudó. Todas ellas son ingenieras informáticas, electrónicas, de telecomunicaciones, química o industriales. Participan en diferentes foros y sociedades científicas y forman parte de la
Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT-Aragón).