El comisionado para la Infancia del Gobierno de Aragón, Florencio García Madrigal, y directivos de la Fundación Pau Gasol, que dirige su actividad de forma preferente a la reducción de la obesidad infantil, han iniciado esta mañana conversaciones, a través de videoconferencia, para la posible realización de un estudio sobre la obesidad entre la población infantil y adolescente de la Comunidad Autónoma de Aragón para la habilitación posterior de unas políticas públicas que tengan como libro de cabecera los datos emanados de este trabajo y enmarcado en el reciente estudio nacional Pasos 2019.
Cristina Ribes, directora ejecutiva de la Fundación Gasol, y Santi Gómez, director de Programas, estuvieron de acuerdo con el comisionado del Gobierno de Aragón en afirmar que el problema de la obesidad en la infancia y la adolescencia “es una enfermedad psico-social que supera con mucho la salud pública y en el que deben implicarse varios departamentos de las administraciones públicas con decisiones y políticas basadas en la evidencia y en datos contemporáneos. Es una cuestión de salud integral y de futuro de las personas y de la sociedad”.
Florencio García Madrigal defendió poder incorporar la realización de un estudio que dibuje con precisión el problema de la obesidad entre la infancia y la adolescencia de la Comunidad Autónoma y más tras la situación creada por la COVID 19. “Una circunstancia como la interrupción escolar, por ejemplo, tiene repercusiones muy directas en la calidad alimentaria al quedar suspendidos también los hábitos de los comedores escolares. En estos momentos, quizás más que en otras épocas, es necesario promover una alimentación saludable, basada en productos frescos y sin aditivos y potenciar el consumo de sistemas locales, especialidad en la que Aragón es una potencia agroalimentaria estratégica”.
La situación creada por la COVID ha forzado aún más si cabe la realización de este estudio ante un deterioro comprobadle de los hábitos de alimentación entre los más jóvenes. “Ya no sirven los datos de anteriores escenarios porque las circunstancias actuales son completamente diferentes. La nueva situación ha de conllevar parámetros diferentes en los que también ha influido y va a influir, sin duda, la nueva realidad de la situación domiciliaria”.
El comisionado del Gobierno de Aragón para la Infancia exploró la firma de un protocolo para encuadrar los cometidos de cada una de las partes y también la posible y aconsejable participación de un equipo de investigación de la Universidad de Zaragoza para dotarle del mayor grado de fiabilidad y pertenencia.