El director general de Carreteras del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Arminio, ha supervisado las obras de renovación en la carretera A-2506. Este tramo, que conecta Monterde, Abanto y Cubel, quedó fuera del Plan Extraordinario de Carreteras.
Las mejoras abarcan 11,5 kilómetros y se centran en el ensanche y actualización de la calzada, alcanzando más de 6 metros de ancho en algunos tramos. El objetivo es permitir una velocidad máxima de 60 km/h. Las obras, que tienen un presupuesto de más de 5,6 millones de euros, se prevé que concluyan a finales de noviembre.
Estas mejoras responden a la necesidad de incrementar la seguridad vial entre los puntos kilométricos 47,800 y 59,290. Dos tercios del tramo están siendo acondicionados para su posterior asfaltado, mientras que en el resto se actualiza solo el pavimento existente.
Además, se están mejorando los sistemas de drenaje y reforzando las cunetas con hormigón para prevenir inundaciones. Posteriormente, se reemplazarán las barreras de seguridad y se actualizarán las señales verticales y horizontales.
La concesionaria encargada de las obras es una UTE formada por PAPSA Infraestructuras y Vialex Constructora Aragonesa.
La renovación de la A-2506 forma parte de un conjunto de mejoras que busca actualizar tramos que no cumplen con las especificaciones del Plan Extraordinario de Carreteras debido a características como curvas pronunciadas o pendientes excesivas.