El transporte público de Zaragoza experimentó en 2021 un incremento del número de viajeros de un 21,8% respecto a la cifra de 2020, el primer año de la pandemia del Covid-19. Aunque se han recuperado 15.313.000 viajeros, el dato global provisional de usuarios queda aún muy lejos del obtenido en 2019.
Así, mientras que el último año “normal” se superaron los 123 millones de usos (123.038.693), en 2021 la cifra -pendiente aún de contrastar las últimas validaciones-, se queda en 85.424.574 viajeros, es decir, un 31% menos de validaciones entre 2021 y 2019.
En cuanto al autobús urbano, en 2021 se registraron 65.578.815 viajes (94.164.615 en 2019 y 54.368.236 en 2020).
El tranvía fue utilizado en 2021 por 19.845.759 usuarios (28.874.078 en 2019 y 15.743.237 en 2020).
Este descenso en el número de viajeros supone un déficit económico en el servicio que ronda los 17,5 millones de euros.
Para la consejera de Servicios Públicos y Movilidad, NataliaChueca, “es evidente que el número de viajeros ha crecido respecto al año 2020, que fue realmente complicado a consecuencia de los confinamientos y de las diferentes medidas adoptadas para luchar contra la pandemia”. Sin embargo, “aunque las cifras han mejorado en 2021, se han recuperado 15 millones de usos, seguimos muy por debajo de lo que debería ser habitual en Zaragoza”.
La consejera ha explicado que “una de las prioridades para 2022 será intentar recuperar al máximo el número de usuarios del servicio público de transporte, que es un elemento esencial para una movilidad urbana sostenible y adecuada para la ciudad”. Para ello se está haciendo una importante apuesta “para seguir mejorando el servicio manteniendo todas las medidas de seguridad sanitaria posibles y reforzar la confianza de los usuarios”.
Pero, además, se va a realizar un exhaustivo trabajo de análisis para determinar con exactitud cómo han cambiado los usos del transporte en la ciudad en los últimos dos años a consecuencia del Covid-19. “Es imprescindible conocer mejor cómo se han modificado los hábitos, con la influencia de lo usos peatonales o de vehículos de movilidad personal, entre otros, para poder definir con exactitud las medidas y mejoras que podamos implementar a lo largo de los próximos meses”.