A finales de agosto, se espera la puesta en marcha de las estaciones de bombeo de Eriste, en el municipio de Sahún, dentro del Valle de Benasque. Esta medida representa un avance significativo en la depuración de las aguas residuales en la cabecera del río Ésera.
Luis Estaún, director del Instituto Aragonés del Agua (IAA), visitó las obras en Eriste y la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Sahún, cuya construcción finalizó en octubre de 2022 con un coste de 300.000 euros. Estaún estuvo acompañado por los alcaldes de Sahún y Benasque, así como por técnicos del IAA y la dirección de obra.
Mientras que las aguas depuradas de Sahún se vierten directamente en el río Ésera, las de Eriste serán bombeadas hasta la EDAR de Benasque. Esta depuradora, construida por el IAA, está diseñada para dar servicio a Benasque y el núcleo de Anciles, cubriendo a una población de 9.000 habitantes y tratando un caudal diario de 2.700 metros cúbicos.
La EDAR de Benasque incluye estaciones de bombeo, tratamiento biológico, eliminación de fósforo y desodorización, y su construcción tuvo un coste de 6,5 millones de euros. Los trabajos, iniciados en junio de 2021, finalizaron en septiembre de 2023, con un periodo de prueba hasta febrero de 2025.
Esta infraestructura forma parte de la convocatoria de subvenciones de depuración del Pirineo 2019-2024, que incluye 16 depuradoras, con una inversión total del IAA de 6,2 millones de euros en ayudas a los municipios beneficiarios.