El Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa ha puesto en marcha un programa de formación inmersiva titulado “Experiencia inversiva para residentes quirúrgicos: de la teoría a la simulación”. Esta actividad se lleva a cabo durante tres días, concretamente el 23, 24 y 25 de junio, y está dirigida a los residentes de primer año en el área quirúrgica.
Un enfoque práctico y dinámico
El curso se desarrolla en el Centro de Investigación Biomédica de Aragón y combina teoría y práctica. Los residentes participan en un aprendizaje simulado que les permite adquirir las competencias y habilidades necesarias para su desempeño en el quirófano. La formación incluye cuatro estaciones donde los participantes rotan en grupos de cuatro o cinco, lo que les facilita la ejecución de diversas habilidades quirúrgicas.
Los instructores son profesionales de especialidades quirúrgicas y enfermería del propio hospital, lo que garantiza una enseñanza de calidad. Entre las habilidades que los residentes aprenden se encuentran la correcta circulación dentro del quirófano, el lavado de manos quirúrgico, el manejo del campo quirúrgico y la importancia del trabajo en equipo.
Preparación para el entorno quirúrgico
La experiencia inmersiva tiene como objetivo preparar a los residentes para enfrentar las exigencias del entorno hospitalario. Se les enseña a reconocer al paciente como el centro de atención y a realizar tareas básicas como sutura y anudado quirúrgico. Este enfoque no solo mejora la calidad de atención al paciente, sino que también contribuye al desarrollo profesional de los residentes, proporcionándoles una base sólida para su futura carrera.
