Iván Calero, uno de los más destacados en la victoria ante el Elche y protagonista en el segundo tanto zaragocista con un centro medido a la cabeza de Mario Soberón, analizaba el partido y destacaba la dificultad que siempre pone un equipo como el Elche CF, así como las jugadas claves del encuentro: «Ha sido un partido muy difícil, con un estilo de juego en el que tienes que adaptarte mucho, sabiendo que si eres capaz de tener pausa y robarles, les puedes hacer mucho daño. Hemos terminado jugada y eso les impedía volver a correr. Con el 1-0 al descanso sabíamos que iban a intentar dar un paso adelante y la expulsión nos ha ayudado a que ese trabajo de la primera parte se haya llevado a cabo incluso con más tranquilidad. Tenemos que estar todos contentos, es una grata vuelta a casa y es el inicio de algo bonito seguro».
A su vez, también reconocía el rol de la afición en el triunfo del equipo en la primera victoria en casa de la temporada: «Al final ellos han jugado su papel. Recuerdo un par de ocasiones en la que han tenido que apretar y eso, sinceramente, es la hostia porque de alguna forma hace que nos vengamos arriba y el rival se haga más pequeño. Lo que necesitamos de ellos es eso, que en los momentos buenos estén y sobre todo en los malos, esto es larguísimo. Que sean capaces de entender los partidos y las situaciones y que sean uno más aquí en casa».