Txema Indias ha expuesto con claridad su idea futbolística para el nuevo Real Zaragoza. Consciente de la igualdad de la Segunda División y de los 13 años sin ascenso, ha apostado por un modelo basado en el equilibrio, la solidez y el compromiso colectivo: “Los bloques sólidos, que encajen pocos goles, son la base para competir en esta categoría. No se trata solo de fichar talento, sino de formar un grupo humano fuerte”.
Uno de los focos de atención es el futuro de Kervin Arriaga. “Es un jugador que encaja perfectamente y nos sirve mucho, pero también hay que tener responsabilidad económica. Si desequilibramos la plantilla con una sola ficha elevada, no estaríamos construyendo un equipo competitivo”, explicó Indias, quien reconoció que hay 20 días para decidir si se ejecuta la opción de compra.
Respecto al mercado de fichajes, dejó claro que no es partidario de esperar hasta el último momento salvo que valga la pena: “No tengo obsesión por firmar en agosto. Si encontramos al jugador ideal mañana, lo firmaremos. Pero hay casos, sobre todo con jugadores de Primera, en los que hay que esperar”.
También reconoció la dificultad de confeccionar la plantilla con gran parte del límite salarial consumido: “Aunque tengamos un límite alto, si está comprometido en un 70% es casi como no tenerlo. Nos toca darle muchas vueltas para equilibrar”.
Sobre el ADN del jugador que busca, fue rotundo: “Queremos jugadores que sepan dónde vienen, que estén preparados para lo bueno y lo malo de Zaragoza. La afición aquí es exigente y no podemos fichar a cualquiera”. En esa línea, también dijo que no es partidario de hacer 25 cambios: “Hay jugadores que deben dar más rendimiento. No todo es fichar. También hay que reactivar lo que ya tenemos”.