“Teníamos ganas de volver a pisar el césped y tocar el balón. Es verdad que hemos trabajado en casa, pero es una preparación distinta. Ahora a seguir entrenando y a ver qué tal que se encuentra el cuerpo, porque es toda una incógnita”, apuntó Jorge Pulido en la vuelta a los entrenamientos de la SD Huesca, después de dos semanas de la última sesión en las instalaciones del Pirámide. El capitán comparaba con “el primer día de colegio” la mañana de entrenamientos individuales, divididos por grupos, que había preparado el cuerpo técnico en este regreso a la actividad.
“En estos primeros días hay que ir cogiendo ritmo, al principio no tocar mucho balón, para ir cogiendo ritmo de cara a lesionarse lo menos posible. A final de la semana, igual el míster introduce ya más aspectos individuales. Pero hay que acostumbrar el cuerpo a la actividad”, valoró el central azulgrana. “Hay que tener incluso más cuidado que en pretemporada, ya que venimos de 50 días en los que apenas hemos podido salir ni hacer deporte, y hay que tener mucho cuidado”.
Respecto a la reanudación de la competición, el capitán de la SD Huesca tildó de “raro” el panorama que espera a los equipos, con encuentros a puerta cerrada. “Va a ser raro al no haber gente, será una sensación nueva. Está claro que vencerá el que mejor se adapte a todo ello”.
“Intentaremos dar lo máximo posible. Nos hemos cuidado un montón para llegar aquí, porque sabemos que nos estamos jugando mucho. Estamos en el punto donde queríamos, con opciones de todo, y aunque la situación es difícil y complicada, pondremos todo de nuestra parte para ponernos en forma lo más rápido posible”, concluyó, dirigiéndose a los aficionados del club.