El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado un nuevo protocolo que permite el acceso de perros de asistencia a las ambulancias de los Bomberos. Esta medida facilitará que las personas con discapacidad puedan ser acompañadas por sus animales durante su traslado a centros hospitalarios.
La iniciativa ha sido aprobada por la concejalía de Bomberos y Protección Civil, liderada por Ruth Bravo. La concejal ha destacado la colaboración con la Fundación Once para poner en marcha este protocolo en las próximas emergencias.
El objetivo del protocolo es garantizar una atención adecuada a las personas con discapacidad, en cumplimiento de la normativa vigente. Bravo ha afirmado que este compromiso busca hacer de la ciudad un lugar más accesible para todos.
Los perros de asistencia que se admitirán en las ambulancias están regulados por la normativa autonómica y se clasifican en cinco categorías. Estas incluyen perros guía para personas con discapacidad visual y perros de servicio para quienes requieren apoyo en su vida diaria. También se contemplan perros de señalización de sonidos y perros adiestrados para alertar sobre incidencias médicas.
Armando Cester, jefe médico de Bomberos de Zaragoza, y otros responsables han detallado las condiciones para el traslado de los perros. Si el paciente viaja sentado, el perro podrá estar tumbado a sus pies, sujeto por una correa. Si el paciente no puede viajar sentado, el perro se colocará en un habitáculo específico dentro de la ambulancia, manteniendo la sujeción adecuada.
Este protocolo busca garantizar el acceso a los servicios públicos en igualdad de condiciones. Así, se asegura que las personas con discapacidad puedan ser acompañadas por sus perros de asistencia durante los traslados en ambulancias y al ingresar en los hospitales.