Zaragoza continúa su avance hacia convertirse en una ciudad de referencia en políticas de desarrollo urbano sostenible. La consejera de Hacienda y Fondos Europeos del Ayuntamiento, Blanca Solans, ratificó este compromiso en la Cumbre de las Ciudades del Futuro. Este evento, organizado por la ONU, tuvo lugar en el Palacio de las Naciones en Ginebra, Suiza. A la cumbre asistieron representantes municipales de diversas ciudades del mundo.
La cumbre busca deliberar sobre las implicaciones del ‘Pacto de Futuro’, adoptado por los Estados miembros de la ONU en Nueva York. En este encuentro, se analizan las formas en que las ciudades pueden contribuir a la implementación del Pacto, acelerando la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
«Los ayuntamientos somos los verdaderos motores del cambio», afirmó Solans. Destacó que Zaragoza ya se posiciona como un referente en sostenibilidad y lucha contra el cambio climático. La consejera subrayó que la capital aragonesa ocupa el segundo lugar en calidad de vida en España y el cuarto en Europa.
Zaragoza busca seguir mejorando en sostenibilidad mediante proyectos en energías renovables, renaturalización, movilidad sostenible y economía circular. La ciudad ha logrado captar más de 128 millones de euros del Fondo de Recuperación Next Generation, siendo la segunda en España en captación de fondos comunitarios, después de Madrid.
En reconocimiento a su lucha contra el cambio climático, Zaragoza fue seleccionada por la Comisión Europea como una de las ‘100 ciudades inteligentes y climáticamente neutras’. Para avanzar hacia la neutralidad climática, la ciudad ha desarrollado un Plan de Acción basado en cinco pilares. Estos pilares incluyen la implementación de proyectos de ciudades inteligentes, movilidad sostenible, eficiencia energética, economía circular y soluciones basadas en el agua.
La consejera también mencionó proyectos concretos, como la adquisición de autobuses eléctricos y bicicletas públicas. Se están llevando a cabo iniciativas para la reutilización de residuos orgánicos y la mejora de la gestión del agua. Otros proyectos incluyen la rehabilitación de viviendas energéticamente sostenibles y la restauración de ecosistemas, como las riberas del río Huerva.
Blanca Solans afirmó el compromiso de complementar los fondos europeos con inversiones municipales para hacer realidad estos proyectos. «Estos proyectos buscan consolidar a Zaragoza como una ciudad para vivir, no solo para trabajar», concluyó.