“Bujaraloz siempre ha sido una tierra de cine, con un notable potencial paisajístico representando un enorme plató de cine natural. Esta regulación busca situar a Bujaraloz en el mapa de los productores y equipos de rodaje. Pretendemos conectar todas nuestras potencialidades con el sector cinematográfico”. Con estas palabras define el alcalde de Bujaraloz, Darío Villagrasa, la apuesta que el Ayuntamiento ha realizado durante estos meses para confeccionar una normativa que regule y atraiga al municipio rodajes de cine.
La ordenanza es muy completa e incluye tasas, normativa, comportamiento y desarrollo de los rodajes, medidas de seguridad y de convivencia con la población. Además, introduce un novedoso e interesante apartado: un sistema de incentivos a aquellas producciones que rueden en su término municipal.
En concreto, este sistema de incentivos prevé una ayuda directa a las producciones de un 10 % de los gastos efectuados en el municipio con la contratación de empresas locales, siempre y cuando cumplan unos requisitos. Entre ellos, la grabación o la realización de actuaciones culturales en Bujaraloz. De igual modo, se pone a disposición de las producciones facilidades y medios desde el propio Ayuntamiento.
“Este incentivo es una ayuda humilde, acorde a las posibilidades de un pequeño municipio, pero un mensaje claro: en Bujaraloz queremos que se ruede cine y estamos dispuestos a colaborar institucionalmente a ello”, apunta su alcalde.
A lo largo de la historia, el municipio monegrino ha albergado rodajes como “Pasión bajo el sol” (1954) de Antonio Isasi Isasmendi, “El ataque de los Kurdos” (1968) de J. Gottieb con Lex Barker como protagonista o algunas escenas de la mítica película de Bigas Luna “Jamón, Jamón” (1992), así como numerosos cortometrajes y rodajes publicitarios y de videoclips atesorando más de una quincena de obras. El municipio cuenta a su vez con el Certamen de Cortometrajes de Bujaraloz, que el pasado mes de diciembre celebró su duodécima edición y representa un veterano festival de cine en el que todos los años se dan cita los mejores cortometrajes del cine nacional.
“Somos el primer municipio de Aragón que regula incentivos al rodaje. Ojalá en el futuro muchos ayuntamientos se guíen por esta iniciativa y apuesten por los rodajes de cine y series de televisión pues, además de una importante promoción de nuestro territorio, generan actividad económica y son una fuente de identidad y cultura magnífica para nuestra tierra”, concluye Villagrasa, quien se muestra orgulloso por este logro y espera que a lo largo de este 2020 las productoras incrementen su interés por la zona.