Sin lugar a dudas, en la planificación de la plantilla destaca una Laura Nicholls que ya ha podido comprobar la ilusión que desprende el proyecto: “Estoy muy ilusionada, es honor que hayan querido contar conmigo”, sostiene. “Acabo de llegar y ya me siento muy arropada”, destaca tras cumplir con las primeras solicitudes de fotos y autógrafos. “Zaragoza es una ciudad de baloncesto y cuando me dijeron la que estaban montando no tuve ninguna duda”, subraya la interior cántabra. “Que en tiempos difíciles como estos un club apueste por el baloncesto femenino merece que las jugadoras apostemos y confiemos en su trabajo”, valora contenta por cómo va configurándose el resto del equipo. “Cada vez que veo un fichaje se me escapa una sonrisa pensando lo bien que lo vamos a pasar”, vaticina renunciando al cartel de estrella. “Todas las jugadoras vamos en un mismo camino, tenemos el objetivo de dar con firmeza los primeros pasos de un proyecto que va para largo”, sentencia la santanderina.