El conjunto aragonés continua ejercitándose pese al parón de la competición debido a las ventanas FIBA de clasificación para el EuroBasket 2022 y la previa de clasificación para el Mundial 2023. Sin sus cuatro internacionales, el cuadro rojillo aprovecha estas jornadas de entrenamiento para volver a ponerse a punto físicamente y asimilar los conceptos tácticos y de estilo de Sergio Hernández.
A las órdenes del técnico argentino y con el preparador físico Isaac Caseras tomando también un papel importante durante estas sesiones de entrenamiento, Casademont Zaragoza mantiene el ritmo de trabajo pese a la ausencia de competición. Con Jonathan Barreiro, Robin Benzing, Luka Rupnik y Tryggvi Hlinason concentrados con sus respectivas selecciones, el ‘Oveja’ Hernández aprovecha este paréntesis en el calendario de competición para seguir inoculando al grupo su filosofía de juego, al tiempo que delega en Caseras la labor de mantener a sus efectivos en el major estado físico posible.
Unas jornadas de trabajo que Casademont Zaragoza utiliza también para ultimar también el regreso a la competición de Javier Justiz y Rasheed Sulaimon, a quienes los servicios medicos y de fisioterapia vigilan de manera continua para asegurar el major cuidado posible. Por su parte, Nico Brussino aprovecha también para recuperarse completamente del lance que le impidió finalizar el choque en Fuenlabrada y no jugar en plenas condiciones contra el Barça. Mientras, a la espera de la evolución de la luxación en su pulgar izquierdo, producida en el encuentro ante el cuadro blaugrana, Rodrigo San Miguel completa únicamente la parcel física.