El Real Zaragoza se enfrentaba al CD Leganés en la jornada 18 de la Liga Hypermotion en La Romareda. Un choque para el que Julio Velázquez disponía una alineación muy distinta a la vista hasta ahora: Dani Rebollo era la apuesta en la portería, algo que se podía intuir, pero la sorpresa llegaba en defensa. El técnico elegía tres centrales con Alejandro Francés, Jair Amador y Santiago Mouriño mientras que los carrileros eran para Fran Gámez y Germán Valera. Por delante, Marc Aguado, Toni Moya y Francho Serrano, acompañados arriba por Maikel Mesa y Víctor Mollejo.
La primera oportunidad de peligro no tardaría en llegar, con una internada de Fran Gámez por banda derecha que no conseguía efectuar un centro preciso. Una opción que se repetiría en los primeros minutos, donde el Real Zaragoza estaba percutiendo. Frente a ello, el Leganés generaba la primera ocasión por demérito rival debido a un pase atrás de Dani Rebollo que, tras un mal control, despejaba a córner.
Rondaba el minuto 20 cuando el Leganés cometía una falta tremendamente peligrosa sobre Francho Serrano casi en la frontal del área. Sin embargo, Toni Moya optaba por el disparo al palo del portero y el balón se marchaba muy desviado. El mismo Moya tendría de nuevo un disparo desde la frontal tras una excelente jugada a la contra de Fran Gámez que rechazaba la zaga pepinera.
Sin embargo, la más clara hasta el momento llegaría en el 25’. Un centro de Toni Moya era controlado de forma excelente por Maikel Mesa, que rompía el balón de volea con un tiro que se marchaba rozando el palo de Diego Conde.
La primera tarjeta amarilla sería para Marc Aguado por frenar una contra tras un agarrón sobre Dani Raba. En esa misma acción, el balón era botado al corazón del área y el bote a punto estaba de sorprender a Dani Rebollo. El balón parado estaba siendo un arma importante para el Leganés, que de nuevo ponía un centro desde la esquina cerrado que despejaba el guardameta del conjunto blanquillo con los puños.
Si la primera amonestación había sido para Marc Aguado, la segunda también tendría color blanquiazul. Víctor Mollejo veía también la amarilla en el 33’ tras una dura entrada sobre Miramón. Posteriormente, Fran Gámez disparaba con el exterior a puerta y, a pesar de que un defensor del Leganés desviaba su tiro, el colegiado señalaba saque de puerta.
Aún así, el Real Zaragoza no avisaría más y mandaría al fondo de la red la siguiente ocasión. Maikel Mesa superaba por bajo a Diego Conde tras una internada dentro del área en la que, a pesar de ceder el balón a Mollejo, el esférico le caía de nuevo al mediapunta para definir al palo derecho del guardameta del Leganés. Se adelantaba el Real Zaragoza ante el líder en el 40’ en La Romareda. El propio Maikel Mesa tendría una nueva ocasión al filo del descanso, pero el luminoso no se movería más y la primera parte finalizaba con el 1-0 en el marcador.
Tras el paso por vestuarios, ambos equipos saldrían con los mismos nombres en sus onces. Los primeros 15’ de la segunda parte transcurrirían sin acercamientos peligrosos para ninguno de los dos equipos, a excepción de una contra mal comandada por Santiago Mouriño, que no aprovechaba la oportunidad para sacar ventaja de una jugada que entrañaba mucho peligro.
El primero en mover el banquillo sería el CD Leganés. Portillo era quien entraba en el terreno de juego en sustitución de Julián Chicco. Buscaba revolucionar Borja Jiménez a su equipo frente a un Real Zaragoza que se estaba imponiendo en la segunda parte teniendo también el dominio del balón.
En lo que respecta al primer cambio del Real Zaragoza, sería Jaume Grau. Julio Velázquez decidía dar algo más de aire al centro del campo del conjunto blanquillo y el sustituido era Maikel Mesa. Por parte del Leganés, Cisse, Djouahra y Ureña entraban al césped por Iker Undabarrena, Diego García y Neyou. En el 85’, el CD Leganés realizaba su último cambio. Franquesa era el elegido para salir y en su lugar entraba Naim García. Sin embargo, sorprendía que en el Real Zaragoza cumplido el 86’ solo se hubiese realizado un único cambio.
Llegarían en el 87’, con una nueva ventana en la que Velázquez realizaba un doble cambio. Marc Aguado y Víctor Mollejo eran sustituidos por Bermejo y Sergi Enrich. Inmediatamente después, Toni Moya era el cuarto sustituido, con visibles molestias musculares, dando entrada a Alberto Vaquero.
Se añadían seis minutos en un partido donde el Real Zaragoza estaba cerca de llevrase la victoria después de mucho tiempo. Como último cambio, Julio Velázquez elegía a Andrés Borge. El sustituido era Germán Valera, que había ejercido como carrilero izquierdo durante la mayoría de los minutos. Finalmente, el equipo de Julio Velázquez conseguía los tres puntos ante un líder que caía en La Romareda después de muchas jornadas consecutivas sumando. El Real Zaragoza volvía a regalar un triunfo a su afición tres meses después en su feudo en un primer paso que se espera que sea el inicio de una nueva era en la capital aragonesa.