El Consejo Aragonés de Formación Profesional ha dado luz verde al VI Plan Aragonés de FP, una iniciativa que busca modernizar y adaptar la formación profesional a las necesidades del mercado laboral. Este plan, que se presentará al Consejo de Gobierno para su aprobación, establece una hoja de ruta para los próximos cuatro años, con el objetivo de fortalecer la empleabilidad y mejorar la cualificación de los aragoneses.
Objetivos del VI Plan Aragonés de FP
El nuevo plan se basa en seis líneas estratégicas que incluyen la actualización de la formación profesional, el fomento de la FP dual intensiva y el desarrollo de competencias digitales avanzadas. Las consejeras de Empleo y Educación, Claudia Pérez Forniés y Tomasa Hernández, han destacado la importancia de ajustar la oferta formativa a las demandas del tejido productivo, especialmente en un contexto de rápida evolución tecnológica.
En la actualidad, más de 26.700 alumnos están matriculados en los Grados D y E en centros sostenidos con fondos públicos, mientras que cerca de 40.000 personas reciben acciones de formación gestionadas por el INAEM. Esta oferta educativa sigue en crecimiento, lo que refleja el interés y la necesidad de mejorar las competencias laborales en la Comunidad Autónoma.
Acciones para mejorar la formación profesional
El plan incluye una treintena de acciones destinadas a fortalecer la formación profesional, como la creación de programas de formación para el profesorado en áreas tecnológicas emergentes y el fomento de comunidades de aprendizaje. También se prevé desarrollar un mapa de FP que alinee la oferta educativa con las necesidades del mercado laboral.
Entre las medidas destacadas, se busca aumentar la accesibilidad y la equidad en la formación profesional, garantizando que todos los aragoneses, especialmente aquellos en áreas rurales o en situación de vulnerabilidad, puedan acceder a estas enseñanzas. Además, se promoverán ciclos itinerantes y formación virtual para facilitar el acceso a la educación.