Aragón cuenta con 145 máquinas quitanieves dotadas por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para hacer frente a las situaciones adversas que se puedan producir por la climatología en los próximos meses en la Red de Carreteras del Estado.
Así se ha puesto de manifiesto en la reunión mantenida hoy sobre el Plan de Vialidad Invernal 2021-2022, que ha estado presidida por la Delegada del Gobierno, Rosa Serrano, para coordinar a todos los agentes implicados en el dispositivo especial de vialidad invernal. La delegada ha destacado que “garantizar la seguridad vial en las carreteras aragonesas y reducir al mínimo los tramos con restricciones de tráfico” es un objetivo prioritario.
En conjunto se dispone de 140 máquinas quitanieves de empuje y 5 dinámicas, pertenecientes al Ministerio de Fomento. Además, el Estado cuenta con 31 almacenes de fundentes distribuidos en la Comunidad y de 80 silos con una capacidad total de 22.480 toneladas de sal para hacer frente a las situaciones climatológicas adversas en la Red de Carreteras del Estado. Asimismo, el Ministerio de Fomento dispone de 18 plantas y 39 depósitos de salmuera con capacidad total para 1.248.000 litros; 95 estaciones meteorológicas y 11 cañones antialudes, medios destinados a evitar que el frío y la nieve alteren las condiciones viales.
La seguridad vial en las carreteras durante la época de mayor adversidad climatológica es el objetivo principal del Plan de Vialidad Invernal. Este modo de trabajo pretende asegurar la normalidad en las carreteras y reducir al mínimo el número de tramos con restricciones al tráfico ante el riesgo de nevadas y heladas. También tiene como objetivo la atención a las personas ocupantes de vehículos cuando las circunstancias lo hagan necesario.
Su puesta en marcha ha sido crucial en los dos últimos inviernos debido a las borrascas Gloria y Filomena. Gracias a la colaboración entre Aemet y el resto de integrantes en el dispositivo se pudo minimizar al máximo las afecciones.
El dispositivo especial para esta temporada invernal comenzó el 1 de noviembre y se mantendrá activado hasta el próximo 30 de abril de 2022 y en esta reunión también han participado los subdelegados del Gobierno en Huesca, Teruel y Zaragoza – Silvia Salazar, Ramón Morro y Fernando Beltrán, respectivamente-. Otros intervinientes han sido, entre otros, el Jefe de la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón, Rafael López Guarga, así como representantes de la Jefatura de Tráfico, la Guardia Civil de Tráfico, la Unidad Militar de Emergencias y la Agencia estatal de Meteorología.
El protocolo activa un conjunto de actuaciones para mantener las carreteras de la red estatal en las condiciones de funcionalidad, vialidad y seguridad óptimas en condiciones climatológicas extremas, en especial ante la presencia de hielo y nieve.
Dentro de las operaciones de vialidad invernal se realizan tratamientos preventivos en situaciones de bajas temperaturas y curativos en caso de nevadas en las autopistas, autovías y carreteras convencionales afectadas.
A los usuarios de las vías se les recomienda atender en todo momento las recomendaciones que se hagan desde los organismos responsables en caso de situaciones meteorológicas adversas.
El operativo de actuación comienza con los avisos de previsión meteorológica emitidos por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) que comprenden tres niveles: Alerta, Pre Emergencia y Emergencia.
A nivel central, el Protocolo contempla junto con el Comité Estatal de Coordinación, una Unidad de Valoración de Riesgos, integrada por representantes de la Agencia Estatal de Meteorología, de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, de la Dirección General de Carreteras y de la Dirección General de Tráfico. Esta Unidad se pondrá en marcha cuando la situación lo requiera, con el fin de valorar la situación meteorológica prevista y su posible incidencia en la vialidad en la red de carreteras estatales.
Ello se completa con otras actuaciones de carácter preventivo, materializadas en la difusión de alertas y avisos a los organismos y servicios de las Administraciones involucrados en el Protocolo, que se lleva a cabo desde la Agencia Estatal de Meteorología y la Dirección General de Protección Civil y Emergencias.