La llegada de Federico Bikoro al Real Zaragoza, el verano pasado, fue una notable sorpresa. Existían serias dudas sobre los méritos que acumulaba para firmar contrato con el club blanquillo. ¿Una corazonada del director deportivo?
90 minutos ante el Socuéllamos en Copa del Rey ha sido, de momento, todo su bagaje. En enero salió hacia el Badajoz, equipo del grupo IV de segunda B donde ha aportado más bien poco: cuatro partidos que suman 155 minutos.
Tiene contrato hasta 2023. Sus opciones de seguir son muy pocas y ninguna si se logra el ascenso.