“Tan importante como las comunicaciones físicas lo son las virtuales y un
territorio con carencias de conexión no tiene las mismas posibilidades para
desarrollarse”.
Así de rotundo se manifiesta el presidente de la Comarca de las Cinco Villas, Santos Navarro, al hablar del estudio de conectividad que se ha llevado a cabo en la zona durante este verano. El mismo comenzará a presentarse hoy a través de varias reuniones virtuales con los alcaldes cincovilleses.
Este estudio ha sido posible con el patrocinio comarcal -que ha aportado 8.500 euros para ello- y la colaboración de Adefo Cinco Villas y el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicaciones de Aragón, ya que han sido dos estudiantes de esta rama los que han hecho posible.
De hecho, en diciembre del año pasado, la Comarca de las Cinco Villas, junto a Adefo y el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicaciones y la Asociación de Ingenieros de Telecomunicaciones de Aragón, se firmó un convenio de colaboración para desarrollar acciones conjuntas con el fin de ayudar a la transformación digital del territorio.
Fue el primer convenio de estas características que rubricaba una comarca con estos organismos adscritos a la Universidad de Zaragoza. El estudio de conectividad realizado ha sido la primera de las acciones llevadas a cabo dentro de este acuerdo.
TRABAJO DE CAMPO
Durante dos meses, los dos estudiantes becados han recorrido la comarca,
pueblo por pueblo, para llevar a cabo mediciones de cobertura.
Para ello, han diseñado un software de medición – para saber la velocidad de subida y bajada de una conexión- con el que han ido sacando las conclusiones de este estudio, así como indicando elementos claves para mejorar las comunicaciones en la zona, entre ellos, qué tipo de tecnologías funcionaban mejor en cada punto (ADSL, WiMAX, módem 4G, satélite, fibra, etc.) Así, han determinado cuáles son las zonas blancas y grises NGA, siendo las blancas aquellas que no tiene cobertura de redes de banda ancha, ni tampoco tienen previsión para recibirla por parte de un operador en un plazo de tres años en base a planes de inversión creíbles.
Por otro lado, una zona gris es aquella que solo tiene cobertura de banda ancha de nueva generación o previsión para recibir instalación en un plazo de tres años por parte de un único operador.
En el caso concreto de las Cinco Villas, son zonas grises: Ardisa, Casas
de Esper, Asín, Bagüés, El Bayo, Farasdués, El Sabinar, Santa Anastasia, Valareña, Erla, El Frago, Isuerre, Lobera de Onsella, Longás, Luesia, Orés, LasPedrosas, Pintano, Undués-Pintano, Puendeluna, Alera, Sierra de Luna,Sofuentes, Sos del Rey Católico, Santa Engracia, Valpalmas y Fuencalderas.
Por el contrario, las zonas blancas son: Castejón de Valdejasa, Bardenas,
Rivas, Lacorvilla, Piedratajada y Marracos.
Tanto las zonas blancas, como las grises pueden ser beneficiarias de
subvenciones estatales para mejorar la conectividad. En el estudio también se
apuntan algunas de las ayudas más importantes para solicitar, por parte de los
consistorios cincovilleses.
PUNTO DE PARTIDA
Antes de proceder a las mediciones en los municipios, a finales de junio, se envió
a todas las localidades de las Cinco Villas una encuesta cuyo objetivo era conocer previamente la situación de cada localidad.
Dentro de la misma se preguntaba por las compañías que operaban en cada una de ellas y los tipos de conexión a internet disponibles (3G, 4G, ADSL, fibra, etc.).
Igualmente, se pedía a los encuestados que comentaran su percepción actual tanto de la cobertura móvil como de la conexión cableada. La recopilación de estos datos ha permitido hacer una ficha personalizada de cada municipio.
Además, se ha llevado a cabo un exhaustivo trabajo de campo para medir realmente la conectividad en cada localidad, utilizando tres móviles de compañías diferentes. En este caso, las más habituales: Movistar, Orange y Vodafone.
Las conclusiones dejan patente algo, que la situación de la conectividad en la comarca de las Cinco Villas “es en general bastante limitada, ya que usa tecnologías de acceso anticuadas respecto a las existentes en las grandes ciudades”, dice el estudio. Aunque hay municipios en los que “sería posible realizar un despliegue de fibra óptica de manera sencilla”, apunta el informe.
De hecho, la instalación de fibra óptica sería la mejor solución, según
apunta este estudio, pero, tiene un coste muy alto.
De ahí que, “desde la comarca se esté trabajando para ver todas las posibilidades”, indica su presidente. Algo en lo que es “absolutamente imprescindible contar con la implicación de la administración, para poder abordar soluciones que ayuden a fijar población. Si queremos luchar contra la despoblación y apostar por el mundo rural hay que contar con las mismas posibilidades”, recalca Santos Navarro.
En muchos de estos casos, conseguir la conectividad de una gran ciudad
es demasiado costoso e inviable para cualquier operador, debido tanto a la
dificultad del despliegue como a la baja densidad de clientes por localidad. Pero,
las inversiones en conectividad “son vitales si queremos apostar por el teletrabajado o por la instalación de empresas que realizan su principal actividad a través de internet”, concluye el presidente comarcal.