Han pasado tres semanas desde que la Sociedad Deportiva Huesca disputara su último encuentro en El Alcoraz y las ganas de volver a casa se disparan. El próximo rival invita a pensar en una cita grande, de las que pueden ser cruciales para empujar al equipo hacia arriba en la tabla. El Sevilla FC regresa a la capital oscense dos temporadas después (J11ª LaLiga Santander, sáb, 18:30h), convertido en uno de los grandes de LaLiga, inmerso en la batalla de la Liga de Campeones y lanzado por sus últimos resultados positivos en ambas competiciones. Un oponente de altura al que los azulgranas no temen: para el recuerdo queda aquella gran tarde del 2 de marzo de 2019, en plenos carnavales, culminada con el golazo de la victoria con un gol antológico de Chimy Ávila en el minuto 98 (2-1).
Los altoaragoneses, en el puesto 19º y a dos puntos de la salvación, se enfrentan a un equipo que navega 7º, con seis puntos más que la SD Huesca. Los empates contra SD Eibar en casa y CA Osasuna fuera son los últimos resultados de los de Míchel. El Sevilla FC de Julen Lopetegui no ha conocido el triunfo en sus tres últimos partidos como visitante en la competición doméstica, en los que ha sacado un empate contra el FC Barcelona y cosechado dos derrotas ante el Athletic Club y el Granada CF. En las filas sevillistas, destaca el poderío defensivo de Diego Carlos, la experiencia de jugadores como Rakitic o Jesús Navas y la calidad de Ocampos, Jordán y un largo etcétera. En estilo de juego, los de Nervión son el equipo que más posesión de balón acumula por partido junto al FC Barcelona y los terceros que menos goles reciben del campeonato.
El choque supondrá el reencuentro de Sandro Ramírez con sus excompañeros, con los que jugó un total de 18 encuentros en la temporada 17/18, cedido por el Everton FC. El Alcoraz da una nueva opción a la SD Huesca de encontrar el triunfo que se resiste hasta ahora. El partidazo que espera bien merece una victoria.