El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha pronunciado hoy su discurso durante el primer Debate sobre el Estado de la Comunidad de la presente Legislatura, «la legislatura de la pandemia», cuyo comienzo y colofón ha tenido un recuerdo para las 1.640 víctimas mortales de la Covid-19 a día de hoy.
En una radiografía de la situación actual, Lambán ha querido subrayar que «nuestra acción de Gobierno para proteger la salud de los aragoneses se ha basado siempre en dos principios fundamentales: en no escatimar nunca recursos materiales y en no dudar ni un instante a la hora de tomar decisiones, por duras que éstas sean».
Tras repasar las consecuencias y la alteración de nuestra realidad cotidiana y del revés para una economía puntera antes de la pandemia, ha apelado una vez más a la unidad y al esfuerzo para salir más fortalecidos sin dejar a nadie atrás, a diferencia de la anterior crisis económica.
Para ello, ha realizado una encendida defensa del autogobierno y de la eficacia de la administración autonómica para hacer frente con más eficacia al virus que ha puesto a prueba el sistema político. En este sentido, afirma, “con mucho orgullo”, que Aragón tiene un Gobierno que ha manejado el timón “con mano firme, mostrando responsabilidad, compromiso y capacidad de decisión y gestión desde todos sus departamentos”.
Ha recordado la acción transversal realizada desde el gobierno cuatripartito, que ha permitido afrontar la crisis, tanto en su primera fase como en la actual, con un criterio uniforme, garantizando la prestación de los servicios públicos de la sanidad, la educación y los servicios sociales, sin desatender la fuerza motriz de la economía productiva, todo ello, a través de la reorientación del presupuesto 2020 para atender las necesidades surgidas de la crisis sanitaria. El reflejo ha sido Estrategia Aragonesa de Recuperación Económica y Social, un ejemplo único de unidad en España, que fue suscrita por todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria, a excepción de Vox, así como por los agentes sociales y los ayuntamientos aragoneses. A juicio de Lambán, “Aragón tiene recursos y fundamentos suficientes para salir de este túnel y que el Gobierno, de acuerdo con quienes quieran compartir ese prioritario propósito, los va a activar todos para ver la luz cuanto antes”.
La siguiente etapa es la elaboración de los presupuestos del próximo año, de la forma más consensuada posible, siguiendo la senda de la Estrategia, con el fin de articular la salida a la crisis sanitaria y económica y seguir dando seguridad existencial a los ciudadanos.
Frente a la pandemia, un proyecto común que, como herramienta sumada a los presupuestos autonómicos y con reflejo en los Presupuestos Generales del Estado, pone el acento también en el Fondo Europeo de Reconstrucción, en cuya participación trabaja ya el Gobierno de Aragón en todos sus departamentos y con la Mesa del Diálogo Social, dando protagonismo al tejido empresarial aragonés.
Así, en el ámbito de la Mesa del Diálogo Social, la CEOE ha recibido ya 32 proyectos de empresarios de su ámbito, mientras el Gobierno colabora también con Cepyme para agrupar a empresas de pequeño tamaño y facilitar su acceso a las ayudas a través de plataformas. También los sindicatos participarán avalando los proyectos, previa información por parte de los promotores. Por otra parte, en la Comisión Interdepartamental del ejecutivo aragonés se han validado ya 50 proyectos de inversión, que aspiran también a movilizar fondos del ámbito privado.
Lambán afirma que existe una oportunidad en este el Fondo Europeo que, si se utiliza bien, aportará además “recursos importantes para recuperar el terreno perdido por la pandemia y avanzar mucho en la construcción del Aragón social, verde y digital que habíamos empezado antes”.
El Gobierno viene trabajando en el diseño de proyectos ajustados a las exigencias europeas de transición ecológica, transición digital y resiliencia que, de recibir financiación europea, superarán los mil millones de euros en 2021.
Respecto a la digitalización de la sociedad, de la administración y de la economía aragonesas, ha citado algunos de estos proyectos a presentar: conectividad al 100% de la población con fibra y 5G, así como comercios, polígonos y servicios de emergencias; digitalización integral de la administración pública y simplificación y automatización de procesos y servicios, así como de los servicios públicos sociosanitarios, educativos y económicos.
En este concepto se incluye el desarrollo de todas las posibilidades de la implantación en Aragón (Huesca, Villanueva y El Burgo) de Amazon Web Services para crear en nuestra comunidad un “poderoso” ecosistema digital, a través de la formación, la investigación y la atracción de inversiones del sector, tal como ha ocurrido en las otras seis sedes europeas de la multinacional (Cork, Fráncfort, Londres, París, Estocolmo y ahora Milán).
Respecto a la transición ecológica, los proyectos están asociados a los conceptos de: movilidad sostenible, modernización de la industria de la automoción hacia el coche eléctrico; Mobility City; Aragón Territorio Circular, proyecto que engloba la revalorización de residuos, generación de energía renovable y almacenamiento, materiales de construcción, movilidad sostenible; Impulso logístico a través del ferrocarril: hub cerealístico de Aragón, Canfranc, parcela ferroviaria en PLAZA, gestión terminal intermodal PLATEA o autopista ferroviaria Zaragoza-Algeciras; renovación de edificios y vehículos oficiales para reducir emisiones y costes; impulso del Valle de Hidrógeno que apuesta en toda la cadena de valor del hidrógeno (inversiones de producción, consumo, transporte sostenible, movilidad de núcleos urbanos) para mantener nuestro liderazgo en renovables.
Igualmente, se contemplan líneas de ayudas para empresas/industrias agroalimentarias, pensando en el “formidable” impulso para el sector que supondrá la entrada en funcionamiento de Bonárea en Épila, donde están previstos4.000 empleos directos más pequeñas empresas suministradoras de nueva creación.
También contempla la rehabilitación de vivienda para consumo energético 0; la generación de energías limpias para autoconsumo agrario; contaminantes cero, medioambiente limpio de toxico y agricultura de precisión.
Otros proyectos pasan por el aprovechamiento sostenible de recursos naturales: regadíos eficientes y riqueza forestal, acometiendo la limpieza de montes para producción de biomasa o, dentro del Ebro2030, el Plan Ribera, con cambio de usos agrícolas en tierras inundables y su sustitución por producción forestal o maderera. Igualmente, el desarrollo de un potente sector de bioeconomía en Teruel en torno al centro de Platea, la formación profesional del centro San Blas y el potente sector privado de la provincia.
El presidente aragonés confía en lograr su financiación en el marco del Fondo Europeo que cuenta como aval la eficacia demostrada en la gestión de fondos europeos, al haber sido capaces de ejecutar al 80%, cuando la media española no llega al 40%. “También la hemos acreditado a la hora de atraer y hacer realidad grandes proyectos”, añade Lambán que, en consecuencia, cree que se puede ser “razonablemente optimistas” respecto a propias posibilidades para aprovechar el Fondo Europeo, “en el que está en juego buena parte de nuestro futuro como Comunidad y el de todos y cada uno de sus habitantes”, ha sentenciado.
Asumir responsabilidades
Tras el capítulo más pragmático enfocado al futuro, el Presidente de Aragón ha guardado las reflexiones más políticas en el colofón de su discurso para indicar que, ante el momento vivido de incertidumbre, de desconcierto ante el presente y de miedo al futuro, los poderes públicos “tienen obligación de procurar estabilidad, de ofrecer seguridad, de gobernar desde la razón y el sentido común y de eludir sobresaltos innecesarios”. Por ello, entiende que “nunca ha sido tan necesaria esa estabilidad política y social”.
Al mismo tiempo, alude a la necesidad de “estabilidad histórica”, convencido de que las constituciones y las instituciones de ellas emanadas “sirven mejor al país y le dan prestigio y respetabilidad internacional conforme el paso del tiempo y las va asentando y fortaleciendo”.
Lambán considera un “error mayúsculo” cuestionar el orden constitucional de cuatro décadas de vida y defiende, desde la cogobernanza de España, el ejercicio de esta visión constructiva de la política. Tanto que, en una apuesta por la verdad, la transparencia y la unidad, traslada la necesidad de asumir responsabilidades, cada uno las suyas y añade que es al Gobierno a quien más responsabilidades cabe exigirle, incluidas aquellas que vayan en contra de su interés electoral. Incluso, hasta el punto de estar dispuesto a perder las elecciones por cumplir con su deber, pero de la misma manera que la oposición debe estar dispuesta a no ganarlas con el mismo fin.
Apela el presidente a la responsabilidad de todos, a la individual y, tras loar las capacidades de los aragoneses, afirma que “es nuestra hora. Es la hora de nuestra generación. Vivimos una situación excepcional, como nunca antes habíamos vivido, que nos obliga a dar la mejor versión de nosotros mismos” y poder ser recordados por las generaciones futuras con respeto “porque, en la hora más difícil, supimos estar a la altura de las circunstancias”, finaliza Lambán su discurso, pronunciado hoy durante el primer día del debate sobre el estado de la comunidad que mañana continuará con las intervenciones de los grupos parlamentarios.