El municipio cincovillés de Biota cuenta ya con un nuevo recurso turístico: su
torreón medieval, recientemente musealizado.
La construcción, que data del siglo XII, se ha recuperado con el paso de
los años. Han hecho falta varias intervenciones, realizadas con ayuda de una
escuela taller especializada en albañilería, carpintería y cantería, para devolver
el esplendor a esta construcción, emblema de la localidad.
Situado junto al palacio de los Vizcondes de Biota, el torreón alberga tres
plantas en las que se alojan diferentes recursos explicativos que recogen los
diferentes periodos históricos del municipio, desde la prehistoria, hasta la
actualidad.
Uno de los aspectos más curiosos que alberga el nuevo centro de
interpretación es la relación de Biota con el Monte Saso. “Es el hito más
importante de los últimos 200 años”, reconoce el alcalde biotano, Ezequiel
Marco.
En los años 1960/70, se produjo un gran éxodo del medio rural a las
ciudades, sin embargo, en Biota, “no se produce, porque hay más de 300
personas que tienen derechos de explotación en las tierras del Monte Saso”.
Todas ellas, “se transformaron con la llegada del riego desde el Canal de
las Bardenas, lo que permite que mucha gente pueda vivir en Biota y no se
marche”, indica Marco.
Si bien, lo más peculiar es que “los derechos de estas tierras no pasan de
padres a hijos primogénitos, como en la mayor parte de los municipios
aragoneses, sino que la heredera de esas tierras -unas cuatro hectáreas- es la
hija menor, consiguiendo así que muchas familias se queden a vivir en Biota,
porque para tener derecho a esas tierras tienes que estar casado en Biota y vivir
en el municipio”, comenta el alcalde biotano
Algo innovador que ha permitido “mantener a mucha población en el
pueblo, dado que ahora, estas tierras triplican su producción al haberse
modernizado los regadíos”, indica el máximo responsable de Biota.
MÁS CURIOSIDADES
Las tres plantas del torreón albergan otras curiosidades del municipio. Por
ejemplo, la situación de Biota en la prehistoria, su papel como territorio vascón y
en la época romana. “En Biota está la presa de Cubalmena, que abastece las
termas del yacimiento romano de Los Bañales, la gran ciudad romana de la
comarca”, precisa Marco.
Además, Biota vivió la época visigoda, fue bastión cristiano y un cruce de
caminos, con un ramal importante del Camino de Santiago.
Fruto de estas etapas históricas son también los monumentos que jalonan
la localidad, como la iglesia de San Miguel, “la joya románica del municipio”,
reconoce con orgullo su alcalde. Aunque también tienen en la localidad la iglesia
de la Natividad.