La Dirección General de Transportes, en coordinación con el Consorcio de Transportes del Área de Zaragoza, ha puesto en marcha una campaña para la inspección del servicio de transporte de viajeros en el ámbito del área metropolitana de Zaragoza y con la que se controlará el cumplimiento de las medidas sanitarias obligatorias con el Decreto-Ley 7/2020 de 19 de octubre, del Gobierno de Aragón.
Las inspecciones, que ya comenzaron la semana pasada, servirán para controlar que se está cumpliendo con las medidas de seguridad referidas al aforo de los vehículos. En este sentido, el director general de Transportes, Gregorio Briz, ha explicado que “vigilar el aforo en dos sentidos, por un lado, que no se supere el 75% de aforo permitido y, por otro lado, controlar que se está permitiendo el acceso hasta ese 75% para evitar esperas innecesarias en las paradas de los autobuses”.
Desde la Dirección General de Transportes se ha señalado que “hemos recibido quejas de determinados servicios en los que se permite el acceso de menos usuarios de los permitidos, personas que deben esperar al siguiente servicio o que acaban optando por el uso del vehículo privado”.
Además, también se controlará que los autobuses cuenten con la señalización necesaria sobre los asientos que no están disponibles “la forma más efectiva de que se garantice la máxima distancia entre las personas” ha señalado Gregorio Briz. Desde la Dirección General de Transportes se recuerda que aquellos vehículos que no cuenten con esta señalización podrán ser sancionados con multas desde 601 hasta 1.000 euros. También será motivo de sanción que pudiendo contar con más pasajeros, se niegue el acceso al vehículo a personas que se encuentran en las paradas.
En paralelo, se monitoriza el número de usuarios en cada línea de transporte del área metropolitana para conocer la demanda existente y se estudia ya las medidas para reforzar algunos servicios concretos y en horarios puntuales.
