La Diputación de Teruel invertirá este año 100.000 euros en la mejora del equipamiento del Laboratorio de Medio Ambiente de Andorra, lo que permitirá ampliar su cartera de servicios analíticos reforzando las matrices que ya se analizan diariamente en este servicio de la institución provincial. Así se lo trasladaron a las trabajadoras del centro el presidente Manuel Rando y el diputado delegado del laboratorio Antonio Amador en una visita realizada la pasada semana junto a la diputada Susana Traver.
“Se trata de una inversión importante, sobre todo tras muchos años sin hacer inversiones de calado en este servicio. Creemos que es necesario reforzar una labor importantísima, referente en Aragón y así se lo hemos dicho a las cuatro trabajadoras del centro”, ha dicho el presidente Rando antes de asegurar que la intención de la corporación provincial es atender, en la medida de las posibilidades, todas las demandas que pueda requerir un laboratorio que “no solo vigila la calidad del aire de toda la Comunidad Autónoma, también trabaja para muchos ayuntamientos, especialmente para analizar el agua, o apoya al sector agroalimentario de la zona”.
Más concretamente, esa inversión de 100.000 euros en el Laboratorio de Medio Ambiente de Andorra permitirá, entre otras mejoras, adquirir un cromatógrafo de gases/ espectómetro de masas de alta tecnología que permitirá dotar al laboratorio de una potente técnica instrumental de análisis de alta sensibilidad para la detección, identificación y cuantificación de compuestos orgánicos/organometálicos.
El diputado delegado del Laboratorio de Medio Ambiente de Andorra, Antonio Amador, ha señalado que un servicio de estas características “debe contar con el equipamiento más adecuado y, además, de última generación, porque así lo requiere su propia naturaleza de investigación y desarrollo. Nuevamente hablamos de una apuesta por la modernización de los servicios de la institución provincial que, en este caso, les permitirá crecer y ofrecer nuevos análisis para quienes los requieran”.
Calidad del aire
El Laboratorio de Medio Ambiente de Andorra se creó en 1981 con una actividad muy específica: el control de la calidad del aire. Aunque las competencias pertenecen a la administración del Estado y a la autonómica, la Diputación de Teruel quiso unirse a este control y decidió crear este centro para evaluar y controlar el impacto que la Central Térmica de Andorra tenía sobre la zona.
Así, se creo una “Red de Vigilancia” de la calidad del aire alrededor del centro contaminante, que con el tiempo desapareció porque las empresas están obligadas ahora a colocar sus propios equipos automáticos de medición por el “Plan de Vigilancia de la Calidad del Aire”, cuyos datos pasan en tiempo real a la administración.
En la actualidad, el de Andorra es el laboratorio de referencia del Gobierno de Aragón, que tiene las competencias en calidad de aire de la Comunidad Autónoma. En base a un convenio de colaboración firmado entre el Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón y la Diputación de Teruel, en este servicio se determinan, por el método gravimétrico, los niveles de material particulado atmosférico PM10 y PM2,5 de las muestras recogidas en las estaciones de medición que el Gobierno de Aragón tiene distribuidas por toda la Comunidad Autónoma.
Además el Laboratorio de Andorra también puede realizar esta determinación del material particulado atmosférico para ayuntamientos o empresas.
Calidad del agua
Otra de las actividades fundamentales del Laboratorio de Medio Ambiente es el control de aguas de consumo humano. Se realizan análisis de control en depósitos, redes de distribución y grifos de las aguas de consumo humano de muchas localidades de la provincia de Teruel para realizar las determinaciones organolépticas, físico-químicas y microbiológicas exigidas por el Real Decreto 140/2003, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad de agua de consumo humano.
En el servicio de la Diputación de Teruel también se realizan analíticas de aguas naturales para ayuntamientos o clientes particulares, señalando si pueden ser potables, aptas para riegos o cultivos o para suministro a animales, por ejemplo.
Otra actividad muy importante son análisis en aceites de oliva. Se analizan los parámetros que determinan la calidad del aceite: humedad, acidez, peróxidos, K270 y K232, y polifenoles totales. Además también se analiza el contenido graso de las aceitunas, la pasta de aceitunas y los orujos, en unas actividades que suponen un importante apoyo al sector agroalimentario de la zona.
Las actividades del Laboratorio de Medio Ambiente de Andorra se completan con análisis de suelos cultivables y análisis foliares, es decir, de hojas de árboles, sobre todo de cultivo.