Zaragoza no tendrá Fiestas del Pilar. Al menos de forma oficial, pero sí una ofrenda de flores con aforo reducido y diversas actividades culturales como conciertos y jotas. Así lo decidió ayer la Consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón, en un Consejo Local ampliado. Una decisión que, desde el Ayuntamiento de Zaragoza, su vicealcaldesa Sara Fernández, ha compartido por el hecho de poder mantener ciertas actividades programadas.
«Nosotros nos reunimos en junio con la Consejería de Sanidad para ver cuál era la situación, ya que vivimos en una continua incertidumbre por la situación sanitaria. En aquel momento ya acordamos que no podían ser unas fiestas normales, y empezamos a trabajar en una propuesta alternativa, que finalmente es la que se va a llevar a cabo», ha explicado Fernández.
El Ayuntamiento de la capital aragonesa ha compartido esta decisión y ha dicho que seguirán trabajando de manera conjunta. «Es importante tener claro ya el formato para poder trabajar. Los próximos días se convocará a la Junta Local de Seguridad para diseñar todos los dispositivos que sean necesarios y reforzar la seguridad.»
No habrá pregón, pero sí que habrá ofrenda: «Apostamos por el formato reducido con un recorrido alternativo, más corto y sin público. Tendremos que cerrar las cifras con la Consejería de Sanidad, pero nuestra propuesta es que participen 20 personas por grupo más las personas que participarán de forma individual. Nos hubiera gustado que la situación sanitaria hubiera implicado una vuelta a la normalidad pero no ha sido así» ha concluido.