El grupo municipal de VOX en el Ayuntamiento de Zaragoza y el grupo de VOX en la Diputación Provincial de Zaragoza denuncian “la falta de lealtad y colaboración institucional entre los Gobiernos del Ayuntamiento y la DPZ”. Así se han expresado los respectivos portavoces de VOX en ambas instituciones, Julio Calvo y Carlos Rodrigo; quienes denuncian la problemática existente para la apertura y continuidad de la calle Hayedo, actualmente cortada por una tapia y una acequia. La mencionada apertura uniría la prolongación de Gómez Laguna y la calle Monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles. Para ello, es necesaria la cesión de una parcela de unos 365 metros cuadrados de la DPZ al Ayuntamiento, algo que todavía no se ha producido.
Carlos Rodrigo y Julio Calvo han mantenido esta semana un encuentro con los colectivos vecinales de la Unión Vecinal Cesaraugusta, Hispanidad y La Floresta, donde han abordado esta cuestión. Rodrigo califica de “insólito” que la DPZ –presidida por Juan Antonio Sánchez Quero- “ni siquiera haya respondido a las asociaciones vecinales”.
“En VOX demostramos nuestra voluntad para resolver de forma conjunta los problemas que afectan a todos los zaragozanos, sean de la capital o del resto del territorio de la provincia. No debemos olvidar que buena parte de los ingresos de la institución provincial proceden de los zaragozanos. Aunque el compromiso fundamental de la DPZ es la prestación de servicios en la zona rural y atender de forma subsidiaria a los ayuntamientos de pequeño tamaño, tiene el deber de cooperar lealmente con el resto de instituciones en el territorio y contribuir con ellas a satisfacer las necesidades de los vecinos”, valora Carlos Rodrigo.
Por su parte, Julio Calvo informa que VOX preguntará en la próxima comisión del lunes de Urbanismo e Infraestructuras a la consejera Patricia Cavero por las gestiones entre Ayuntamiento y DPZ sobre la prolongación de la calle Hayedo. Para Calvo es “evidente que la proliferación de escalones administrativos y la hipertrofia no contribuye a agilizar los trámites ni a resolver los problemas de los ciudadanos”. “Todo lo contrario”, lamenta.
Calvo ha recordado los dos proyectos de prolongación existentes: una calle convencional –por importe de 2,2 millones de euros- y un camino peatonal –de unos 350.000 €-. “Se renuncia al entubado de la acequia, aunque lógicamente debería aislarse mediante una barandilla y habría que dotarla de iluminación. Las obras sólo se pueden acometer en los meses en los que no se emplea la acequia para riego”, concluye.