Zaragoza conmemora 40 años de políticas municipales por la igualdad de género, una larga trayectoria que, aunque continúa pues todavía queda camino por recorrer, ha convertido a la capital aragonesa en una ciudad más igualitaria, más diversa y más inclusiva.
Durante cuatro décadas, el Ayuntamiento ha trabajado para conseguir una ciudad libre de violencias impulsando medidas desde distintos ámbitos, como la cultura, el empleo, la formación, la corresponsabilidad, la diversidad afectivo-sexual o la atención a las víctimas de violencia de género, con la participación de todos los profesionales implicados que han pasado por el Servicio de Igualdad en este tiempo.
Todo este trabajo y empeño se recoge ahora en la exposición en la calle ‘40 años por la Igualdad’ que ha sido inaugurada este martes por la concejal de Mujer e Igualdad, María Antoñanzas, acompañada por el consejero de Participación, Javier Rodrigo, y que se podrá ver en la Gran Vía de Ramón y Cajal hasta el 31 de agosto. Esta será su primera ubicación, ya que rotará también por otros barrios de la ciudad para que llegue a toda la ciudadanía.
Con esta muestra, que recoge el trabajo de cuatro décadas, el Ayuntamiento comienza los actos conmemorativos del 40 aniversario del Servicio de Mujer e Igualdad, que continuarán después del verano, en el último trimestre del año, con un acto institucional en el Ayuntamiento, el 25 de octubre, y con un programa de actividades, jornadas, mesas redondas y foros de reflexión en el que participarán destacados profesionales.
Estas acciones se reforzarán con una campaña en las calles y autobuses de la ciudad que comenzará el próximo martes para dar a conocer a la ciudadanía todos los servicios que ofrece el Ayuntamiento de Zaragoza en materia de igualdad. Bajo el título de ‘40 años por la Igualdad’, la exposición se compone de nueve paneles con información y fotografías que se remontan a 1982 para comenzar desde entonces un recorrido que muestra al espectador/a todo el trabajo realizado en los últimos años.
Comienza en la cultura, recordando los ciclos, concursos y premios organizados en este tiempo, así como las exposiciones de la sala Juana Francés o las quince muestras itinerantes realizadas en la última década que han recorrido centros educativos y equipamientos municipales, y que han podido ver más de 75.000 visitantes. También se muestran las campañas de celebración del Día Internacional de la Mujer, una cita que se celebra cada 8 de marzo, a la que la capital aragonesa se ha sumado con distintas campañas de sensibilización.
La exposición continúa con los paneles dedicados a la Formación, con los cursos y talleres organizados desde la Casa de la Mujer para avanzar en la igualdad de oportunidades, y con el Empleo, una de las líneas de trabajo del Servicio de Igualdad, que durante este tiempo ha acompañado a las mujeres a superar las dificultades de acceso al mercado laboral.
En 2007 se crea el Servicio de Orientación, tutorización e Intermediación Sociolaboral, según se indica en la exposición, que recuerda también que en 1995 se incorporó a la plantilla la primera mujer conductora de autobús urbano. De ella salían estas palabras recogidas por Heraldo de Aragón, y que también se pueden ver en la exposición:
«Cuando empecé a conducir un autobús, algunos viajeros se extrañaban. Les parecía raro que hubiera mujeres conductoras. Algunos se reían de mí y me preguntaban si sabría llevar un autobús. Y las abuelas se alegraban de verme y me felicitaban».
A partir de ahí, la exposición aborda también la corresponsabilidad, la diversidad afectivo-sexual y la atención a la violencia de género, que supone la máxima expresión de desigualdad y la violación de derechos humanos más generalizada en el mundo.
En este punto, se muestra el trabajo que el Ayuntamiento realiza en prevención, con campañas de sensibilización y ciclos de formación, y en protección con la atención a mujeres que sufren esta lacra con el objetivo de que otras en su misma situación conozcan el servicio y acudan a él para salir de esa situación de maltrato. En los últimos cinco años, la Casa de la Mujer ha atendido a 3.844 mujeres víctimas de violencia de género por parte de sus parejas o exparejas, y 221 mujeres y 263 niños y niñas han tenido que ser alojados en viviendas municipales.
Zaragoza es, además, una ciudad contra las agresiones sexistas como se demuestra con las campañas de concienciación de ‘No es No’ o los puntos violeta que se instalan en los actos multitudinarios y durante las Fiestas del Pilar para evitar conductas machistas.
La concejal de Igualdad, María Antoñanzas, ha echado la vista atrás para reconocer y valorar el trabajo de todas las corporaciones municipales en los últimos cuarenta años, que han contribuido, a su juicio, a hacer de Zaragoza una “ciudad más igualitaria y mejor”.
“Hemos cogido el testigo de todo este trabajo y, con todo ese bagaje y la experiencia que hemos acumulado durante este tiempo, continuamos el camino hasta que consigamos entre todos una igualdad real y efectiva en todos los ámbitos de nuestras vidas”, ha señalado, antes de animar a la ciudadanía a detener su paso unos minutos ante la exposición para conocer todo lo que el Ayuntamiento, que es la administración “más cercana” al ciudadano/a, realiza para hacer de la ciudad un lugar más igualitario e inclusivo.