El Real Zaragoza jugaba este lunes ante el Real Sporting de Gijón en La Romareda con el objetivo de regalar una nueva victoria a su afición tras la lograda hace dos jornadas ante el Andorra. Se trataba del primer partido del conjunto de Velázquez tras el cierre del mercado de invierno y, en él, el Real Zaragoza había incorporado tres futbolistas.
Uno de ellos, Edgar Badia, sumaba una nueva titularidad. Algo habitual desde que llegó, pues desde el partido ante el Eldense, el guardameta ha sido el elegido por Julio Velázquez. Con él no había ningún tipo de duda, pero faltaba por ver si el técnico iba a apostar por los dos que llegaron en el último día de mercado: Raúl Guti y Akim Zedadka. Dicho y hecho, ambos fueron de la partida ante el conjunto asturiano.
En el caso de Zedadka, tras un gran tiempo de inactividad con el Lille, volvía a competir y lo hacía desde el carril diestro debido a las lesiones de Fran Gámez y Andrés Borge, ambos fuera de la convocatoria. El jugador sostuvo su banda y se desplegó a nivel ofensivo, aunque el gol llegaría por la banda contraria gracias a un cabezazo de Mollejo.
Con respecto a Raúl Guti, volvía a ponerse la elástica zaragocista después de tres temporadas y media. El aragonés formaba parte de una alineación en la que el centro del campo lo conformaba junto a Francho Serrano y Toni Moya, este último realizando las labores del sanciado Marc Aguado. Guti sería quien tendría peor suerte, ya que sería sustituido en el 53’ tras un mal gesto con la rodilla en una acción en la que su disparo terminaba en el palo. Jaume Grau entraría en su lugar en un debut agridulce debido a la lesión.