Enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas se concentrarán, el próximo 10 de febrero, para denunciar la grave situación de deterioro y precariedad que se sufre en los centros de salud de Aragón y reclamar a la Consejería de Sanidad aragonesa que no siga abandonando a la Atención Primaria y ponga en marcha de manera urgente medidas eficaces que mejoren la atención sanitaria y cuidados que recibe el conjunto de la ciudadanía. Esta es la primera iniciativa de un calendario de protestas y movilizaciones que se desarrollarán a lo largo de todo el 2022.
La convocatoria de concentraciones en los centros de salud de Huesca, Teruel y Zaragoza y del conjunto de las capitales de provincia de todo el Estado supone el inicio de la nueva estrategia de acciones reivindicativas y movilizaciones que el Sindicato de Enfermería, SATSE, va a impulsar a lo largo de 2022 para denunciar el grave deterioro de nuestro sistema sanitario y reclamar mejoras en las condiciones profesionales y laborales las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas.
SATSE inicia estas acciones en defensa de la sanidad y sus profesionales en los centros de salud una vez que la pandemia del Covid-19 ha puesto de especial relevancia los numerosos problemas y deficiencias que la Atención Primaria de los centros de Aragón viene arrastrando desde hace muchos años, y que las distintas administraciones han sido incapaces de resolver, los cuales repercuten directamente en la atención sanitaria y cuidados que se deben prestar a la ciudadanía.
Una escasez estructural y crónica de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, falta de medios y recursos, sobrecarga y tensión asistencial continúa o el cierre de centros son los principales problemas que la crisis del Covid-19 ha agravado y que conllevan que las personas deban esperar días o semanas para ser atendidos presencialmente, “si es que los consiguen sin poner en riesgo la salud de las personas”, y, además, sin el tiempo de dedicación que a los profesionales les gustaría, o que ya no pueden beneficiarse de programas de prevención y promoción de la salud porque han sido pospuestos “sine die”.
Asimismo el Sindicato de Enfermería pretende con estas concentraciones que las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas de Aragón tengan la oportunidad de alzar su voz, de manera conjunta y unida, y exigir a todos los responsables públicos y políticos, sean del signo que sean, que la Atención Primaria merece y necesita un cambio por la salud y bienestar general de toda la sociedad, y que los profesionales no pueden soportar por más tiempo una situación extenuante y agotadora física y psíquicamente que pone en grave riesgo su propia salud.
SATSE subraya que ha llegado el momento de que las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas defiendan la salud y bienestar de todas las personas, así como una mejora de sus condiciones laborales y profesionales, ejerciendo su legítimo derecho a la movilización y protesta pública. “No nos han dejado otra alternativa que alzar la voz en los centros de salud para intentar evitar un daño a nuestro sistema sanitario que en poco tiempo será irreparable”, señala.
El Sindicato de Enfermería es muy consciente del cansancio y desgaste a todos los niveles (físico, psicológico, emocional…) que sufren las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, tras dos años de lucha incansable contra la pandemia, pero su participación es decisiva para que, con la fuerza que les da la razón y la justicia, defiendan y exijan lo que a todos y todas nos une, como es lograr un sistema sanitario público, universal y de calidad, y unos profesionales reconocidos y protegidos.