El campus de multideporte organizado por Special Olympics ha celebrado su 22ª edición en Alcalá de la Selva, Teruel. Este año, el campamento ha contado con la participación de 47 personas con discapacidad intelectual, de entre 14 y 35 años, y 18 monitores voluntarios. La actividad, que se desarrolló del 2 al 11 de agosto, ha logrado cumplir con éxito sus objetivos.
El técnico de Special Olympics, Kike García, destaca que el principal propósito del campamento es «reforzar la autonomía personal de los participantes, mientras disfrutan de una experiencia única». El resultado ha sido positivo tanto para los participantes como para los monitores, quienes han vivido una experiencia enriquecedora.
Cristina Navarro, directora gerente del Instituto Aragonés de la Juventud (IAJ), visitó el campus y elogió la labor realizada. Navarro señaló que eventos como este «son un modelo de convivencia con la discapacidad». En su visita, observó cómo los participantes trabajaron en actividades básicas diarias de manera autónoma y cómo se fomentaron actividades participativas y comunes. La directora gerente subrayó la importancia de estos campamentos para la inclusión y el desarrollo personal.
Este año, el campamento ha innovado al incorporar nuevas actividades. Además de deportes tradicionales como fútbol, baloncesto y atletismo, se introdujeron deportes de interior y actividades relacionadas con el folclore aragonés. Entre las nuevas propuestas se incluyeron festividades típicas como el Cipotegato, las fiestas del Pilar y San Lorenzo, así como eventos culturales como el sermón de las tortillas de Teruel y la feria de los oficios perdidos de Lituénigo.
Kike García resalta que las experiencias vividas han sido un «descubrimiento» para los participantes, quienes han tenido la oportunidad de explorar nuevas actividades y tradiciones. Cada año, el campamento ofrece nuevas sensaciones y aprendizajes, y este ha sido particularmente espectacular.