Las autoridades francesas han logrado adelantar la fecha prevista de reapertura, inicialmente fijada para enero, gracias a la meteorología favorable y al intenso ritmo de trabajo de los operarios, que incluso han trabajado los fines de semana. Este esfuerzo permitirá que tanto vehículos ligeros como pesados puedan circular nuevamente antes de las fiestas navideñas, una noticia esperada con ansias por los habitantes y transportista.
La carretera RN-134 sufrió graves daños durante las inundaciones, incluido el hundimiento de un tramo de 50 metros de calzada. Los trabajos de reparación, que comenzaron en octubre, han avanzado rápidamente. Inicialmente, se centraron en rellenar el enorme socavón y estabilizar la escalera afectada. En las últimas semanas, las obras han incluido la construcción de un muro de piedra para reforzar la seguridad, la colocación de conducciones para aguas pluviales y la reposición de la calzada.
Carlos Campo ha expresado su satisfacción por la noticia, destacando que la colaboración entre el Gobierno de España y las autoridades francesas ha sido clave para acelerar las obras. «Es una vía fundamental para la población y la economía de los Pirineos Atlánticos».La reapertura supone un alivio para la región, especialmente con la proximidad de las fechas navideñas, un período crucial para la actividad económica.