El Gobierno de Aragón ha presentado alegaciones al Sistema de Financiación Autonómica, destacando la importancia de la orografía y la despoblación. Estas variables son consideradas esenciales para lograr un reparto más equitativo de los recursos económicos entre las distintas comunidades autónomas. Durante una rueda de prensa, el consejero de Hacienda, Interior y Administración Pública, Roberto Bermúdez de Castro, explicó que la intención no es generar confrontación, sino buscar un acuerdo que beneficie a todos.
**Variables clave para la financiación**
El Departamento de Hacienda ha argumentado que es necesario incluir los costes fijos, así como dar mayor peso a las variables correctivas en la financiación. Según un informe de la Cámara de Cuentas de Aragón, el gasto en servicios básicos como sanidad, educación y servicios sociales fue de 2.958 euros por habitante ajustado en 2022, lo que resultó en un déficit de 398 euros por habitante. Esta insuficiencia de ingresos afecta de manera continua a la comunidad, lo que subraya la necesidad de corregir el modelo actual para asegurar un equilibrio en las áreas que enfrentan desafíos demográficos, como la despoblación.
**Impacto de la orografía en la financiación**
La orografía de Aragón, caracterizada por su terreno montañoso y las dificultades climáticas, conlleva un gasto adicional en la creación y mantenimiento de infraestructuras. Aproximadamente el 40% de los municipios de la comunidad se encuentran en ‘Zonas Desfavorecidas de Montaña’, siendo Huesca y Teruel las provincias más afectadas. Además, 25 de los 50 municipios más altos de España están en Aragón, lo que incrementa los costos de mantenimiento de las carreteras, que suman 690 kilómetros en la comunidad.
El Gobierno de Aragón ha instado a que la orografía y la despoblación sean consideradas en el Sistema de Financiación Autonómica, argumentando que estas no son solo variables correctivas, sino que reflejan la demanda real de servicios. Según datos de la OCDE, los costos de educación en áreas rurales son significativamente más altos que en las urbanas. En este contexto, el Gobierno de Aragón aboga por la inclusión de medidas correctoras y un aumento en la financiación para alcanzar un reparto más justo.