El conjunto aragonés ha llegado este lunes a Atenas, capital de Grecia y cuna de la civilización occidental gracias a su legado de lo que ahora es buena parte de nuestra cultura. Los hombres de Diego Ocampo buscarán desde este jueves alcanzar un sueño en el Olimpo del baloncesto, con el aliento de una ciudad y una comunidad que les sigue desde la distancia.
La cuarta edición de la Basketball Champions League se aloja a los pies del Partenón en busca de un nuevo campeón y Casademont Zaragoza está convidado a esa mesa, junto a los anfitriones del AEK, ERA Nymburk, Hapoel Bank Yahav Jerusalem, Hereda San Pablo Burgos, JDA Dijon, Türk Telekom e Iberostar Tenerife. Cuatro días de torneo y tres partidos para alcanzar un cetro que los insulares, su rival en cuartos, ya ganó en 2017 con Rodrigo San Miguel, capitán al mando de la nave rojilla, en sus filas.
Son los ocho mejores conjuntos por méritos propios. El equipo zaragozano adquirió esta plaza para la Final Eight, gracias a su primer puesto en el Grupo D (10 victorias y 4 derrotas) y la doble victoria ante el Lietkabelis en los octavos de final. Para alcanzar la Final Four restaba un enfrentamiento pero la pandemia detuvo el reloj del baloncesto y del mundo. Este jueves, día 1 de octubre, el tiempo de la competición continental se pone de nuevo en marcha para los rojillos con el choque de cuartos ante Iberostar Tenerife (20.30 horas, Aragón TV).
La expedición rojilla, vestida de Alejandro Moda, ha aterrizado en el aeropuerto de Atenas poco antes de las 19.00 horas, las 18.00 en España, con un plantel sin Vit Krejci, homenajeado por Benzing y Ocampo en la victoria de ayer ante Herbalife Gran Canaria. El también canterano Josep Fermí Cera ocupa la plaza del checo, mientras que Diego Ocampo se incorporará al grupo el martes, tras viajar desde Barcelona por un asunto personal. El resto del equipo descansa ya a esta hora en Atenas, ágora por donde pasa el sueño europeo de Casademont Zaragoza.