Las estancias del programa de termalismo de la Diputación de Zaragoza (DPZ) han comenzado esta semana, permitiendo que 977 personas de la provincia accedan a los servicios de cuatro balnearios. Este programa, que se desarrolla anualmente, tiene como objetivo mejorar el bienestar, la calidad de vida y la salud de los colectivos beneficiados. Con un presupuesto de 500.000 euros, el programa también contempla 635 plazas adicionales para residentes de Zaragoza capital, cuya adjudicación se resolverá en breve.
Beneficiarios del programa de termalismo
Los balnearios que participan en esta iniciativa son el Balneario Alhama de Aragón, el Balneario La Virgen, el Balneario Termas Pallarés y el Balneario Paracuellos de Jiloca. Las personas que se benefician de este programa están realizando sus reservas para disfrutar de estancias que pueden variar en duración y modalidad. Hay tres tipos de estancias disponibles: una de cinco días y cuatro noches, otra de nueve días y ocho noches, y estancias sin pernocta que pueden ser de cinco o de nueve días.
Cada estancia incluye un reconocimiento médico personalizado al llegar al balneario y un seguimiento médico durante el tratamiento. Además, los beneficiarios recibirán un mínimo de tres tratamientos termales diarios, que serán prescritos por el médico. También se proporcionará atención sanitaria a través de un ATS, tal como se ha hecho en ediciones anteriores.
La diputada delegada de Bienestar Social de la DPZ, Mercedes Trébol, ha señalado que las mejoras implementadas en esta convocatoria tienen como propósito ampliar el acceso a los servicios de los balnearios para un mayor número de personas. Este enfoque busca no solo beneficiar a los usuarios, sino también apoyar la actividad económica de los balnearios de la provincia.
Requisitos para participar en el programa
Los beneficiarios de estos bonos termales deben ser personas mayores de 60 años, o menores de 60 que sean pensionistas (excepto por orfandad) o que tengan reconocida una discapacidad igual o superior al 60% o un grado II de dependencia. Trébol ha enfatizado el compromiso de la DPZ para contribuir a la mejora del estado de bienestar y la salud de los colectivos en situación de vulnerabilidad mediante tratamientos en los balnearios, donde se ha demostrado la eficacia de las aguas minero-medicinales en la prevención, curación y rehabilitación.
La convocatoria de este año ha incluido una novedad: se ha priorizado a los empadronados en los municipios de la provincia frente a los de la capital. Por esta razón, la apertura inicial se realizó para los primeros, y las plazas no cubiertas se destinarán a un segundo turno para los residentes de Zaragoza capital. Actualmente, el Servicio de Bienestar Social está evaluando y tramitando las solicitudes para poder resolver las plazas disponibles.
El programa de termalismo de la DPZ se ha consolidado como una herramienta valiosa para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de la provincia. La combinación de tratamientos de salud y bienestar en un entorno natural ha demostrado ser beneficiosa para muchas personas que buscan mejorar su estado físico y mental. A medida que avanza la temporada de estancias, se espera que más beneficiarios aprovechen esta oportunidad para disfrutar de los beneficios de las aguas termales.
El impacto positivo de este programa no solo se refleja en la salud de los participantes, sino también en la economía local. Al fomentar el uso de los balnearios, se contribuye a la sostenibilidad de estos establecimientos y se promueve el turismo en la Comunidad Autónoma de Aragón. La DPZ continúa trabajando en la mejora y ampliación de estos programas para asegurar que más ciudadanos puedan beneficiarse de ellos en el futuro.
Con el inicio de las estancias, se espera que los balnearios se llenen de vida y actividad, ofreciendo un espacio de relajación y tratamiento a quienes más lo necesitan. La combinación de atención médica y el ambiente terapéutico de los balnearios proporciona una experiencia única que puede marcar la diferencia en la calidad de vida de las personas.
