Las fuertes lluvias del 6 de julio en la provincia de Zaragoza han causado más de 100 millones de euros en pérdidas para las empresas locales, según estima la CEOE. Estos daños incluyen más de 60 millones de euros en instalaciones, maquinaria y almacenes afectados directamente por las inundaciones y el lodo.
Además de los daños materiales, las empresas también han sufrido la paralización parcial o total de sus actividades debido a los destrozos, lo que ha generado pérdidas adicionales. Asimismo, la imposibilidad de cumplir con contratos y suministros comprometidos ha puesto en riesgo la relación con los clientes.
La CEOE Aragón y la CEOE Zaragoza han trasladado estos datos a las autoridades competentes, como la Delegación de Gobierno, Protección Civil y el Ayuntamiento de Zaragoza, en una reunión para evaluar provisionalmente los daños y solicitar la declaración de zona catastrófica por parte del Consejo de Ministros. Esta declaración es fundamental para obtener ayudas que puedan mitigar las pérdidas, junto con la cobertura proporcionada por el Consorcio de Compensación de Seguros.
Aunque aún no se han contabilizado todos los daños, especialmente en los polígonos de Cuarte, Cadrete y La Cartuja, es crucial realizar evaluaciones rápidas para agilizar la posibilidad de recibir ayudas.
Por otro lado, la CEOE destaca la importancia de una revisión exhaustiva por parte de todas las administraciones involucradas, en colaboración con las empresas, para evitar que se repitan estos graves efectos de las lluvias torrenciales. La interlocución y colaboración abierta con la Delegación del Gobierno, los ayuntamientos y Protección Civil ha sido valorada positivamente por la CEOE.