Con los datos del IPC del mes de julio publicados hoy, Aragón continúa con la tasa de inflación más alta en lo que va de año y en las series de los últimos 20 años
Las consecuencias de la guerra de Ucrania, la crisis energética y otros factores siguen dañando los bolsillos de las aragonesas y aragoneses en las tres provincias. Huesca y Teruel son las provincias con mayor inflación con un 12,2% y con una diferencia de un +0.1 y +0,3 respectivamente respecto al mes de junio, mientras en Zaragoza sube un +0,5 respecto al mes anterior y se sitúa en el 11,1%.
En el conjunto de Aragón, en el mes de julio los tres grupos de bienes y servicios que más contribuyen a la elevada inflación siguen siendo, al igual que el mes pasado, los de “Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles” con un 26,3% interanual, “Transporte” con el 16%, y “Alimentos y Bebidas no alcohólicas” que alcanza el 14%. Si bien, es de destacar que “Transporte” presenta un descenso de su tasa interanual de un -3%, mientras “Vivienda” se incrementa en un 3,8 y los “Alimentos” en un 0,1%.
También destaca el elevado incremento del “Vestido y calzado” que llega al 7,4 de inflación, frente al 3,6 del mes de junio.
La variación dentro de estos grupos corresponde esencialmente a los elevados índices de los subgrupos de “Electricidad, gas y otros combustibles” (55,6% interanual) que sigue creciendo, “Utilización de vehículos personales” que a pesar de su descenso sigue en cifras elevadas del 19,9% y “Alimentos” con el 14,4%.
Destaca también en el resto de subgrupos la tasa de los “Paquetes turísticos” que llegan al 17,9% y los “Servicios de alojamiento” con un 15,9% (aunque sufre un importante descenso con respecto a junio), debido seguramente a la estación veraniega.
Respecto a los grupos que presentan algún descenso, en el mes de julio el más significativo se produce en el ya mencionado grupo de “Transporte”, seguido de “Comunicaciones”, que mantiene su variación de inflación anual negativa con el -2,1%, y los grupos de “Restaurantes y Hoteles”, “Otros bienes y servicios” y “Bebidas alcohólicas y tabaco” con variaciones anuales respecto a junio inferiores al -0,3%.
Por su parte, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se eleva en Aragón al 6,1 de variación anual (un incremento de 0,5 con respecto a junio), la misma cifra que se alcanza a nivel nacional (6,1 en julio).
Estas tasas de inflación subyacente son las mayores registradas desde hace 20 años. Debemos remontarnos hasta el año 2002 para encontrar, en el mes de junio, una inflación subyacente del 4,4%, pero en ese momento la tasa de inflación global era del 3,5% frente al 11,4% actual. Estos datos demuestran los precios han subido en productos de consumo básicos para la economía de cualquier persona.
Valoración CCOO Aragón
Para CCOO Aragón los elevados precios tienen su origen, sin duda, en la actual situación de incertidumbre mundial. Pero a dicha incertidumbre su suman otros factores como los altos beneficios empresariales de determinados sectores que el sindicato apunta en el informe presentado el mes pasado. Para la organización sindical algunos sectores como el energético, financiero o manufacturero sitúan sus beneficios empresariales por encima de los niveles previos a la pandemia.
Además, la elevada inflación subyacente demuestra que los precios han subido en productos de consumo básicos para la economía de cualquier persona, mientras el 50% de las personas asalariadas siguen sin la revisión de sus convenios colectivos y solo el 32% de la población asalariada con convenio ha pactado para 2022 incrementos de salario por encima del 2%.
Por ello, el sindicato apunta la solución en una doble vertiente: establecer precios máximos sobre bienes y servicios básicos y revitalizar la negociación colectiva con incrementos salariales que mantengan el poder adquisitivo de los mismos.
En cuanto al primer punto CCOO propone al Gobierno hacer uso del artículo 149.13 de la Constitución establecer precios máximos sobre bienes y servicios básicos, revisables cuatrimestralmente, que eviten una escalada de precios, garanticen la sostenibilidad económica en el medio plazo de las empresas que los apliquen con un margen de beneficio razonable.
Respecto a la negociación colectiva el sindicato retomará en septiembre las movilizaciones “salario o conflicto” que ya había iniciado antes del verano, si no hay negociación colectiva y las empresas siguen bloqueando la firma de convenios y haciendo que sean las trabajadoras y trabajadores quienes paguen las consecuencias de la elevada inflación.