La SD Tarazona regresó de vacío de su visita al Estadi Nacional tras caer por 1-0 ante el FC Andorra en un partido muy igualado y de ritmo controlado, que se decidió por pequeños detalles en la segunda mitad. A pesar de la derrota, los de Molo mostraron solidez defensiva y mantuvieron sus opciones hasta el final, aunque sin lograr materializar sus aproximaciones.
El choque arrancó con equilibrio y mucho respeto entre ambos conjuntos. Durante los primeros compases, las llegadas a portería fueron escasas y el juego se desarrolló principalmente en el centro del campo. Manu Rico vio la primera amarilla del partido en el minuto 12, reflejo de la intensidad con la que se disputó cada balón.
A medida que pasaban los minutos, el equipo turiasonense fue ganando metros y tuvo su primer acercamiento peligroso en el 35’, cuando Adri Fuentes protagonizó una buena jugada que fue neutralizada por la zaga local. El primer tiempo concluyó sin goles, con una SD Tarazona bien plantada y un FC Andorra que no lograba imponer su ritmo habitual.
Tras el descanso, Molo buscó frescura en ataque con la entrada de Luis Rivas por Pradera en el minuto 50. Sin embargo, fue el conjunto andorrano quien logró romper la igualdad, aprovechando una acción aislada para hacer el 1-0, un golpe que obligó a la Tarazona a arriesgar.
Lejos de venirse abajo, el conjunto aragonés se volcó en busca del empate. Rivas, precisamente, estuvo muy cerca de lograrlo en el minuto 85 con un remate dentro del área que se marchó rozando el palo. Esa fue la ocasión más clara para los visitantes, que en los últimos minutos pusieron toda la carne en el asador. El árbitro añadió cinco minutos de añadido, pero el marcador ya no se movería.
Con esta derrota, la SD Tarazona pone fin a una buena racha sin perder y tendrá que centrarse ahora en preparar el siguiente compromiso liguero, con la confianza de que, a pesar del resultado, el equipo compitió de tú a tú frente a uno de los rivales más exigentes de la categoría.
Una derrota dolorosa, pero que deja lecturas positivas en cuanto a actitud, solidez defensiva y compromiso colectivo. Ahora toca levantarse y mirar hacia adelante.