La Universidad de Zaragoza cerrará sus instalaciones la primera quincena de agosto, del 1 al 15 de agosto, como medida de ahorro del gasto energético y con el fin de realizar una gestión óptima de los espacios durante estas fechas en las que el uso disminuye de forma significativa.
Los valores estimados del cierre energético anual (Semana Santa, Navidad, Verano)
indican que la universidad puede dejar de gastar una cuantía superior al medio millón de
euros en suministros como agua, electricidad y combustible.
Para lograr ese objetivo, la Universidad de Zaragoza anima a la comunidad universitaria a
realizar las siguientes acciones:
Apagar los ordenadores y pantallas.
Eliminar el standby de todos los equipos existentes.
Apagar el termostato de los despachos y laboratorios.
Apagar equipos auxiliares de climatización.
Asegurar el apagado de la iluminación.
Agrupar materiales de ensayo en el menor número de neveras o congeladores y desconectar aquellos que se quedan vacíos.
Ajustar programaciones de equipos de encendido automático.
Desconectar cargadores o equipos con transformador.
Bajar las persianas o lamas para evitar el calentamiento de las estancias.
Destacar que existen edificios de uso extraordinario donde sí que se mantendrá una apertura diaria por su singularidad, como el Hospital Clínico Veterinario.
Se adjuntan declaraciones de Alberto Gil Costa, gerente de la Universidad de Zaragoza, sobre las actividades de ahorro de contención del gasto asociadas al Plan de Racionalización en materia de consumo energético del campus aragonés.