La recientemente renombrada Gran Vía de Don Santiago Ramón y Cajal cuenta desde hoy con una escultura del científico español más importante de nuestra historia. El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha inaugurado este nuevo monumento, que se ha instalado en el inicio del paseo, junto a las placas de la nueva denominación de la Gran Vía que fueron colocadas a finales del pasado mes de junio.
La escultura, orientada hacia la antigua Facultad de Medicina, fue encargada por el Ayuntamiento de Zaragoza al escultor Frank Norton, con motivo de la celebración este año del 170 aniversario del nacimiento y el centenario de la jubilación de Santiago Ramón y Cajal, Premio Nobel de Medicina en 1906.
El busto es una réplica de la escultura en bronce de Santiago Ramón y Cajal modelada por el escultor Ángel Bayod Usón en el año 1933, cuyas medidas son: cabeza de 26x18x22cm y peana de 45x25x23cm. Fue adquirida por el consistorio zaragozano en 1968 con destino a la Galería de Hombres Ilustres del Palacio Municipal, formando parte en estos momentos de los fondos del Patrimonio Municipal. Se trata de una réplica, a mayor escala, realizada con medios digitales y artísticos, para lo que previamente se llevó a cabo la digitalización de la obra del escultor Bayod para conseguir un archivo 3D. La imagen resultante fue utilizada por una fresadora para crear un modelo en cera al tamaño deseado y convertirlo después en bronce. Las medidas de esta nueva escultura son: cabeza de 80x55x50cm. y pedestal de 195x75x63cm.
El escultor Frank Norton ha querido incluir en el pedestal una representación gráfica del trabajo de Ramón y Cajal en materia de nervios y neuronas, de una manera simplificada, y su parte posterior está recorrida por algo que sugiere un nervio.